Piden interpelar a Petri por ejercicios antidisturbios en la Armada Argentina: "Ilegal"

El senador de Unión por la Patria Oscar Parrilli exigirá la presencia del ministro de Defensa por la práctica de actividades prohibidas por la ley de Seguridad Interior.

19 de abril, 2025 | 21.21

El interbloque de Unión por la Patria del Senado presentará la próxima semana un pedido de interpelación al ministro de Defensa, Luis Petri, para que explique por qué la Armada Argentina realiza entrenamientos antidisturbios, una actividad prohibida por la Ley de Seguridad Interior y de Inteligencia.

"Queremos que el ministro Petri se presente en el Senado para saber por qué la Armada Argentina hace ensayos de represión callejera contra la población civil, algo completamente ilegal", dijo el senador Oscar Parrilli.

Y agregó: "Ese tipo de prácticas están prohibidas en la Argentina y son causal de juicio político contra el o los funcionarios que lo promuevan u organicen". 

El 4 de abril pasado, la Armada realizó en la base militar de Vicente López un simulacro de acción antidisturbios en el que resultó gravemente herida una integrante de esa fuerza que fue embestida por uno de los instructores del ejercicio y debió ser internada.

Por el hecho, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado abrió una investigación que incluyó varios allanamientos en los domicilios de los integrantes de la fuerza y la base naval, donde secuestraron videos del entrenamiento, documentos y celulares de los implicados para intentar reconstruir los hechos.

Como fue el episodio

Según la reconstrucción de distintas fuentes, Brisa Paez, de 21 años, se encontraba practicando un simulacro de control de disturbios dentro del predio naval cuando, en medio del ejercicio, uno de los instructores impactó con violencia el escudo que sostenía, lo que ocasionó que la voluntaria perdiera el control y cayera hacia atrás golpeando su cabeza contra el suelo.

En tanto, trascendió que, a pesar de mostrar evidentes signos de desorientación, los ejercicios habrían continuado durante varios minutos más y el informe preliminar de la Fiscalía federal indica que Páez contaba con solo cuatro meses de formación dentro de la Armada y no había recibido instrucción previa para este tipo de entrenamientos, que simulan respuestas ante eventuales disturbios.

Si bien en un principio se consideraba al tema como un accidente, con el correr de las horas las compañeras de la joven declararon ante la Justicia y señalaron que Páez habría sido objeto de un trato más violento que el resto del grupo durante la práctica, mientras que algunas mencionaron incluso una posible relación personal previa entre Páez y uno de los instructores, que podría haber influido en el trato recibido.

Según testigos, la joven manifestó un fuerte dolor de cabeza cuando terminó el ejercicio, pero habrían pasado varias horas hasta que un médico de la base la atendió y ordenó su traslado al hospital militar de Campo de Mayo donde Páez reportó pérdida de sensibilidad en el lado izquierdo del cuerpo, lo que encendió las alarmas.

Ante el progresivo empeoramiento del cuadro, la joven fue trasladada al Hospital Militar Central, en Belgrano, donde fue inducida a coma durante una semana y el diagnóstico indicó que había sufrido lesión axonal difusa, una forma grave de daño cerebral provocada por fuerzas de aceleración y desaceleración violentas.