Hablaron por primera vez las mujeres implicadas en la secta rusa de Bariloche: las acusan de captar a otras a través de cursos de yoga

A siete meses del inicio de la causa por la secta rusa que funcionaba en Bariloche, algunas de las mujeres imputadas decidieron declarar y negaron su vinculación con el supuesto líder Konstantin Rudnev.

06 de octubre, 2025 | 14.55

Siete meses han pasado ya desde el inicio de la causa que tiene como principal imputado a Konstantin Rudnev, supuesto líder de la secta rusa que operaba en la ciudad patagónica de San Carlos de Bariloche. Desde entonces, hay 21 personas detenidas, entre ellas, sospechosos acusados de ser partícipes del engaño a través de cursos de yoga.

La secta comenzó a ser investigada luego de que una joven rusa de 22 años, embarazada de casi nueve meses, acudiera al hospital zonal de Bariloche y el personal médico denunciara que la joven se encontraba en un estado de sometimiento. Denuncia que derivó en la investigación de Konstantin Rudnev y de todo su círculo.

La causa, por el momento, tiene a 21 personas bajo sospecha y bajo ese marco, las mujeres imputadas decidieron romper el silencio y negar su vinculación con el presunto líder de la secta.

“Antes de la formulación de cargos estuvimos cinco días paradas, esposadas, sin colchón ni agua suficiente. Una de las chicas se desmayó y aún así la llevaron a declarar", afirmó Svetlana Komkova, lingüista residente en San Pablo e imputada en el caso.

La mujer aclaró que llegó a Bariloche de vacaciones para hacer running en las montañas. "Amo América Latina, pero nunca viví algo así”, lamentó la joven rusa.

Por su parte, Beliakova Nadezhda, quien se describe como mujer de negocios retirada, comentó sobre las condiciones en las que las mantenían, y dijo: "Los calabozos eran muy chicos, tenían solo una cama de piedra, todo estaba oscuro, sin lugar para nada. Nos sacaron la ropa y nos hicieron abrir las piernas. Yo en realidad iba a viajar a Punta del Este”.

Finalmente, la última en declarar fue Tatakanova Ksenia, diseñadora de ropa y amiga de la madre de la joven que dio a luz en el hospital, quien relató: "Me desmayé, me ingresaron al hospital, me pusieron suero y cuando les dije que me sentía bien, me llevaron al calabozo empastillada”.

Ksenia no habla español ni inglés, pero afirmó que su motivo para venir a la Argentina fue para ayudar a una joven embarazada que sufría violencia familiar en Rusia.

La defensa del abogado de las mujeres rusas

Carlos Broitman es el abogado defensor de Svetlana Komkova, Tatakanova Ksenia y Beliakova Nadezhda.

En comunicación con el medio LM de Neuquén, el letrado que encabeza la defensa de las mujeres rusas denunció que la fiscalía busca "estirar la causa" y mantener a los imputados bajo medidas cautelares sin pruebas nuevas.

A su vez, Broitman insistió: “Hace siete meses que no juntan una prueba nueva que tenga relación con el objeto procesal en Argentina. Nos quieren planchar la causa, que se vaya disipando, y el día de mañana van a ir saliendo los imputados en libertad, pero de a grupos”.

Al mismo tiempo, el jurista denunció el armado de procedimientos ilegales, alegando que "una empresa de alquiler de camionetas puso un chip para seguir a los rusos", Broitman argumenta que el personal encubierto tiene un régimen en el Código Procesal Penal, el cual no se está respetando.

Por el momento, el único imputado que permanece detenido es Konstantin Rudnev, quien es señalado como presunto líder de la secta, el resto de los imputados está en libertad y deben presentarse todos los jueves a firmar en la comisaría más cercana.