Andrea Lein, psicóloga clínica, reveló los 3 hábitos saludables que te cambian la vida: "Modifican la estructura del cerebro"

Estos son los 3 hábitos que tenés que practicar a diario para gozar de una buena salud física y mental, según una psicóloga y un neurocientífico.

09 de agosto, 2025 | 13.41

Andrea Lein, psicóloga clínica, reveló cuáles son los tres hábitos saludables que pueden cambiar totalmente tu vida para bien si lográs implementarlos y sostenerlos en el tiempo. Además de la práctica de actividad física, la alimentación saludable y el descanso adecuado, existen algunos hábitos que no muchas personas practican a diario, pero que según la ciencia, pueden mejorar significativamente nuestra salud física y mental.

El estrés es moneda corriente al día de hoy, especialmente en la vida en la ciudad. Es por esto que los médicos y psicólogos recomiendan aplicar ciertos hábitos saludables que puedan contrarrestar el ritmo acelerado de vida que llevamos hoy y sus consecuencias negativas para nuestro cuerpo y mente. Lein, psicóloga, y el neurocientífico Dr. Jamey Maniscalco, revelaron en Real Simple cuáles son estos hábitos.

Los 3 hábitos saludables que te pueden mejorar la vida

1. Exposición a la luz solar

“La luz natural le indica al núcleo supraquiasmático del cerebro (tu ‘reloj maestro’ circadiano) que suprima la melatonina y aumente el cortisol (la hormona estimulante natural del cuerpo)”, explica el neurocientífico Dr. Jamey Maniscalco, PhD. “Este cambio mejora el estado de ánimo, la energía e incluso puede mejorar la calidad del sueño nocturno en los días posteriores”, suma.

La psicóloga Andrea Lein, PhD, agrega que la luz solar “ayuda a regular los ritmos circadianos, favorece la liberación saludable de cortisol y mejora la concentración a lo largo del día”. Si no tenés la posibilidad de salir al exterior al menos 20 minutos por día, ponete cerca de alguna ventana. Lo importante es que el sol te pegue en la cara durante al menos un ratito todos los días.

2. Meditación y respiración consciente

Cuando nos estresamos, nuestro sistema nervioso entra en modo lucha o huida. Es por esto que se aconseja meditar y practicar respiraciones conscientes, para activar el sistema nervioso parasimpático. “Esta quietud intencional ayuda a calmar la respuesta de estrés y crea un espacio mental más amplio. La meditación aumenta la energía al silenciar el ruido mental y mejorar la regulación emocional. A largo plazo, la práctica de la meditación también se ha vinculado con cambios estructurales en el cerebro que favorecen la atención y la resiliencia”, dice Lein.

Basta con meditar durante 5 minutos e ir incrementando esa cantidad de tiempo. La respiración consciente es otro pilar fundamental. “La respiración intencional restaura la calma y la claridad mental”, dice la experta. Practicá estos ejercicios todos los días cuando tengas un rato libre, ya sea en la mañana o a la noche antes de irte a dormir.

3. Diario de gratitud y establecimiento de intenciones

Está comprobado que agradecer tiene enormes beneficios para nuestra salud física y mental. Según Lein, escribir esto "cambia la atención de la urgencia hacia lo que más importa” y “ayuda a establecer el tono para una energía intencionada y alineada”. También podés agradecer en voz alta. "La gratitud activa los circuitos de recompensa del cerebro, aumentando la dopamina y la serotonina. También ayuda a cambiar el filtro de atención del cerebro hacia señales positivas, reforzando un sentido de propósito y calma”, explica el Dr. Maniscalco.

El neurocientífico sugiere que hagas una pausa de 30 segundos al día para preguntarte por qué estás agradecido hoy y qué cosa querés lograr. La idea es que empieces agradeciendo desde lo más simple y cotidiano, sin dar nada por sentado. Por ejemplo, podés agradecer por tener salud, un techo, comida o a tus seres queridos. Si sostenés este hábito en el tiempo, vas a notar cómo se reducen tus niveles de angustia, estrés y ansiedad.