Día Mundial de la Investigación Clínica: fases y por qué es clave para la innovación en salud y desarrollo en Argentina

Se trata del proceso a través del cual se evalúan nuevos medicamentos, vacunas y tratamientos en seres humano. El laboratorio MSD invirtió más de u$s 120 millones en los últimos tres años y mantiene 110 protocolos activos.

20 de mayo, 2025 | 13.41

En el marco del Día Mundial de la Investigación Clínica, que se celebra cada 20 de mayo, se destaca el rol fundamental que cumple esta disciplina en el desarrollo de medicamentos innovadores, la mejora en la calidad de vida de los pacientes y el fortalecimiento del sistema de salud. En Argentina, esta actividad no solo avanza en términos científicos, sino que representa una oportunidad concreta de crecimiento económico, generación de empleo calificado y acceso temprano a terapias de última generación.

¿Qué es la investigación clínica y por qué es tan importante?

La investigación clínica es el proceso mediante el cual se evalúan nuevos medicamentos, vacunas y tratamientos en seres humanos para garantizar su eficacia, seguridad y calidad. Estas evaluaciones se realizan bajo estrictos estándares científicos y éticos, en diversas fases que van desde estudios preclínicos hasta seguimientos posteriores a la comercialización.

Además de su impacto directo en la salud, la investigación clínica impulsa mejoras estructurales en los centros médicos, demanda perfiles profesionales altamente calificados y ofrece acceso temprano a terapias innovadoras, sobre todo para pacientes con necesidades no cubiertas por los tratamientos actuales.

El Día Mundial de la Investigación Clínica conmemora el primer ensayo clínico moderno, realizado por James Lind en 1747, quien investigó los efectos del consumo de cítricos en marineros con escorbuto. Ese experimento sentó las bases del método científico en medicina, que hoy se traduce en rigurosos ensayos clínicos organizados en fases sucesivas para garantizar la seguridad y eficacia de cada tratamiento.

Fases de la investigación clínica

Preclínico: se realizan pruebas de laboratorio y testeo en animales, como paso previo al estudio en humanos.

Fase I: se introduce el nuevo medicamento. Participan entre 20 y 100 pacientes durante varios meses para determinar la dosis segura.

Fase II: se reconocen los efectos terapéuticos y se identifican efectos secundarios. Incluye de 100 a 500 pacientes y puede durar hasta dos años.

Fase III: se monitorean posibles reacciones adversas en un grupo de entre 300 y 3.000 pacientes. Esta fase puede extenderse entre uno y cuatro años.

Fase IV: se realiza tras la comercialización del medicamento, con miles de pacientes. Permite evaluar la seguridad a largo plazo, el valor terapéutico y nuevas aplicaciones del producto.

Argentina: un país con alto potencial en investigación clínica

Gracias a su base científica sólida, marcos regulatorios consolidados y talento humano capacitado, Argentina se posiciona como un actor relevante en el ámbito de la investigación clínica a nivel global. De hecho, se encuentra dentro de los 20 países con mayor cantidad de estudios clínicos activos para MSD, uno de los laboratorios líderes en innovación médica.

Según datos del informe ESID 2023 del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, la inversión en investigación clínica en Argentina creció un 41% en términos reales entre 2021 y 2023, alcanzando los 749 millones de dólares. Esta área representa el 45,8% del total de la inversión empresarial en I+D y concentra el 94% del financiamiento externo destinado al sector.

En línea con su propósito global de transformar la ciencia en soluciones para los pacientes, MSD Argentina reafirma su compromiso con la investigación clínica. La compañía ha invertido más de 120 millones de dólares en los últimos tres años en el país, llevando adelante más de 110 protocolos clínicos activos que involucran a aproximadamente 1.700 pacientes voluntarios.

Este trabajo se apoya en un equipo de más de 140 profesionales especializados, junto a otros 120 expertos en gestión de datos clínicos, que operan desde uno de los siete centros globales de procesamiento que MSD tiene en el mundo, ubicado en Argentina.

“Invertir en investigación clínica es apostar por el fortalecimiento del sistema de salud, el desarrollo de talento local, y el acceso de los pacientes a las terapias más innovadoras”, señaló Jose María Palmeiro, director de Investigaciones Clínicas de MSD Argentina.