Charlotte Chopin es una profesora de yoga que sacudió a todos por su vigencia a los 102 años aparentando de 70. La disciplina que busca lograr el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu se convirtió en una filosofía de vida y contó su historia sobre la práctica que descubrió a sus 50 años y le proporcionó bienestar y salud físico.
A sus 102 años, Charlotte Chopin continúa impartiendo clases de yoga tres veces por semana en Léré, una pequeña localidad de la región del Cher, en Francia. Lo hace en un antiguo edificio policial convertido en centro comunitario, donde enseña con vitalidad en un entorno sencillo pero cargado de autenticidad.
Su historia es aún más extraordinaria considerando su recorrido de vida: nacida en 1922 en Alemania, vivió la guerra, colaboró con la Cruz Roja, trabajó como secretaria ejecutiva en África y Europa, y recién descubrió el yoga a los 50 años, tras lo cual lo adoptó como forma de vida. Desde entonces, ha enseñado por más de cinco décadas a miles de alumnos.
En 2022, con 99 años, sorprendió al público en el programa Got Talent interpretando una serie de posturas frente a la audiencia: “Solo quería sorprender a mi familia participando en un espectáculo del que ni siquiera sabía nada”, confesó con humildad. Su aparición la catapultó a la fama y, en 2024, recibió el prestigioso Padma Shri -una de las mayores distinciones civiles de la India- en reconocimiento a su labor por "desafiar los límites de la edad" y promover el yoga como herramienta de bienestar integral.
Su historia ha sido comentada por medios, que destacaron cómo su actividad siguió siendo apasionada "con energía en un entorno sencillo pero lleno de vitalidad", lo que ejemplifica la potencia del yoga para el bienestar físico y mental en los adultos mayores. De hecho, expertos en envejecimiento validaron estos beneficios: mejorar la presión arterial, la función pulmonar, el equilibrio, la memoria y reducir la fragilidad son algunos de los efectos comprobados en la ciencia.