Muchas parejas y relaciones amorosas viven situaciones complejas cuando una de las personas es muy “controladora”, pero la Inteligencia artificial reveló cuáles son las frases más utilizadas por aquellos que buscan “tener cortos” al otro. El asistente virtual detalló que identificar estas oraciones repetidas es una clave para evitar caer en manipulaciones y poner límites a dinámicas tóxicas.
De esta manera, la Inteligencia artificial ChatGPT analizó todos los patrones de lenguaje y pudo determinar que existen ciertas frases y latiguillos que expresan las personas “más controladoras” con mucha frecuencia en sus conversaciones. Se trata de oraciones que pueden parecer inofensivas, pero que en realidad buscan manipular, influir en las emociones y limitar la autonomía de los demás.
En este marco, el chatbot de OpenAI explicó que quienes ejercen el control sobre su pareja suelen emplear palabras con demasiada carga emocional, porque están diseñadas para generar culpa. También buscan incentivar la dependencia o una sensación de deuda con el otro. Ante todo ello, conocer estas frases es importante para identificar los comportamientos manipuladores y poner límites a dinámicas dañinas en cualquier relación.
Las frases que más suelen repetir las personas controladoras, según la IA
Luego, la IA también explicó que el lenguaje tiene un poder enorme en las relaciones interpersonales y remarcó que detectar este tipo de frases ayuda a identificar dinámicas tóxicas. En esa línea consideró que aprender a reconocerlas es el primer paso para poner límites y evitar caer en juegos manipuladores.
Puntualmente, la Inteligencia artificial enumeró las siguientes frases como las “más repetidas” entre las personas que buscan dominar y manipular a quienes los rodean:
- “Esto es por tu propio bien”
Esta frase es una de las más utilizadas para justificar actitudes intrusivas o restrictivas. La persona controladora la usa para disfrazar su dominio como un acto de cuidado, lo que puede generar culpa en el otro si intenta poner límites.
- “Si no fuera por mí, no podrías hacerlo”
Quienes buscan generar dependencia emocional repiten esta expresión para menospreciar la capacidad de los demás. Su intención es hacer sentir a la otra persona que no puede lograr nada por sí misma y que necesita del controlador para avanzar.
- “Siempre sabés que tengo la razón”
Esta es una manera de invalidar cualquier perspectiva contraria y reforzar el poder en la conversación. Con esta afirmación, la persona controladora establece que su opinión es la única válida, limitando el pensamiento crítico del otro.
- “No puedo confiar en que lo hagas bien”
Quienes ejercen el control suelen utilizar esta frase para desvalorizar las habilidades del otro y justificar su constante intervención. Esto deja a la otra persona en un papel secundario y refuerza su sensación de incompetencia.
- “Deberías agradecerme por todo lo que hago por vos”
Esta expresión busca crear una deuda emocional, donde el receptor siente la obligación de estar agradecido constantemente. Es una estrategia de manipulación que refuerza el poder del controlador sobre la relación.