La señal del WiFi puede debilitarse, presentar cortes o funcionar a menor velocidad cuando ciertos tipos de iluminación emiten radiación electromagnética o están demasiado cerca del equipo receptor.
Qué lámparas provocan interferencias
-
Luces fluorescentes compactas (CFL): emiten microondas que pueden interferir con las señales WiFi, sobre todo si están cerca del router o del dispositivo conectado.
-
Fluorescentes de tubo: muy comunes en cocinas, oficinas u otros espacios, también pueden afectar la red inalámbrica.
-
Lámparas LED de baja calidad: aunque los LED de buena marca suelen estar bien protegidos, los de gama baja pueden emitir interferencias electromagnéticas.
-
Lámparas halógenas: a pesar de que su uso se reduce, siguen siendo una fuente potencial de problemas.
-
Luces con estructuras metálicas grandes o decorativas: el metal alrededor de la bombilla o el cableado metálico cercano puede aumentar la interferencia.
Cómo minimizar el impacto en tu conexión
-
Colocá el router lo más lejos posible de luminarias fuertes o sospechosas. Idealmente, evitá tener lámparas fluorescentes justo al lado.
-
Usá la banda de 5 GHz de tu WiFi si tu router lo permite, ya que suele ser menos susceptible a interferencias que la de 2,4 GHz.
-
Invertí en bombillas de buena calidad que cumplan con normativas de emisiones electromagnéticas. Evitá opciones ultraeconómicas sin marca confiable.
-
Si no podés cambiar lámparas, considerá usar repetidores WiFi, sistemas de red en malla o dispositivos PLC para mejorar la cobertura.
A veces, un simple cambio de bombilla o reubicar el router puede marcar una gran diferencia en la calidad del WiFi. Si ya descartaste al proveedor, revisá la iluminación de tu hogar: puede que ahí esté la verdadera causa de tus problemas de conexión.