¿Tenés apps que preferís que nadie vea en el menú? ¿Querés prestar tu teléfono sin mostrar todo lo que usás? Samsung tiene una función integrada para ocultar aplicaciones, ideal para mejorar la privacidad, mantener el orden y evitar miradas curiosas, sin tener que desinstalar nada.
Cómo ocultar apps en tu Samsung: el paso a paso
- Ajustes de pantalla de inicio: desde la pantalla de inicio, mantené pulsado un espacio vacío o hacé el gesto de pinza con dos dedos. Ingresá en “Ajustes de pantalla de inicio” y buscá la opción Ocultar aplicaciones.
- Elegí y ocultá tus apps: seleccioná las apps que quieras ocultar (puede ser WhatsApp, apps bancarias, redes sociales u otras). Confirmá la selección tocando “Hecho” o “Aceptar”. Las aplicaciones desaparecen del cajón de apps y de la pantalla principal, pero siguen instaladas y funcionando normalmente.
Carpeta Segura: para quienes buscan máxima privacidad
Otra herramienta potente de los Samsung es la Carpeta Segura: una zona protegida por PIN, patrón o huella donde podés guardar apps, fotos y archivos privados. Es ideal si compartís el teléfono o si necesitás doble seguridad, ya que nadie podrá abrir la Carpeta Segura sin autenticarse.
¿Cuál es la diferencia?
-
Ocultar apps solo las saca de la vista, pero siguen accesibles si alguien busca su nombre en el teléfono.
-
Carpeta Segura protege con contraseña y hasta permite instalar una “segunda copia” de la misma app solo para ese espacio, útil si querés usar dos cuentas de WhatsApp, por ejemplo.
¿Cuándo conviene ocultar apps y cuándo no?
-
Recomendado: si tenés apps sensibles (banca, salud, trabajo) o simplemente querés menos íconos en el menú.
-
No recomendable: para apps que requieren notificaciones frecuentes (podrías perderte alertas importantes si no revisás).
-
Si buscás máxima privacidad, combiná ambas funciones: primero ocultá la app y después movela a Carpeta Segura.
Consejo extra: siempre verificá qué permisos tiene cada app y mantené actualizado el software del teléfono. Las opciones para ocultar apps pueden variar según la versión de One UI, pero en general están disponibles en modelos recientes de Samsung.
Ocultar aplicaciones no es solo cuestión de privacidad, también puede ayudarte a mantener el orden y aprovechar mejor tu teléfono. Así, si tenés chicos, prestás el equipo o simplemente querés separar vida personal y laboral, lo hacés en minutos y sin apps externas.