La empresa internacional LATAM Airlines oficializó la reapertura de sus vuelos directos entre Buenos Aires y Miami, una ruta fundamental para el mercado argentino que vuelve a conectar ambos destinos con una frecuencia diaria. El primer vuelo despegó desde el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, operado con un moderno Boeing 787 Dreamliner.
Esta renovación promete reducir los tiempos de viaje y mejorar la experiencia para quienes viajan hacia Estados Unidos. La ruta forma parte de un trayecto que inicia en Santiago de Chile, pasando por Buenos Aires antes de llegar a Miami. Los aviones asignados a esta línea son los Boeing 787-8 y 787-9, con capacidad para transportar entre 271 y 300 pasajeros, adaptados para ofrecer mayor confort en todas las clases.
Entre las novedades, destacan las nuevas cabinas con Suites Recaro R7 en Premium Business, que incorporan puertas corredizas para brindar más privacidad, y una clase Economy Plus renovada, que ofrece mayor espacio y reclinación para los pasajeros. Florencia Scardaccione, Gerente Comercial de LATAM en Argentina, celebró la recepción positiva de esta reapertura: “Es un orgullo ver despegar esta ruta con un nivel de ocupación tan alto desde el primer día. Confirma que estamos respondiendo a una necesidad real de nuestros clientes y que Miami continúa consolidándose como uno de los destinos preferidos de los argentinos”.
Además, la ejecutiva remarcó el compromiso de la compañía con la calidad del servicio: “Queremos que quienes elijan viajar con nosotros vivan una experiencia moderna, cómoda y cercana”. Este relanzamiento se enmarca dentro del Joint Venture con Delta Air Lines, una alianza estratégica que permite a los viajeros acceder a una extensa red integrada, facilitando conexiones desde Miami hacia más de 200 destinos en Estados Unidos y Canadá.
Con la operación diaria, LATAM proyecta transportar más de 170.000 pasajeros al año en este tramo, reforzando su papel en la conexión entre el Cono Sur y Norteamérica. Más allá del turismo emisivo, que impulsa uno de los destinos favoritos de los argentinos para compras y vacaciones, esta ruta apunta también a fortalecer el turismo receptivo y el intercambio comercial bilateral.
