A qué hora se puede sacarle fotos a Mercurio: cuándo es y cómo hacerlo

El cielo ofrecerá una oportunidad única para observar y fotografiar a Mercurio, el planeta más cercano al Sol y uno de los más esquivos para la vista humana.

14 de agosto, 2025 | 11.28

La observación de Mercurio es un desafío incluso para los aficionados a la astronomía más experimentados. Este planeta, el más cercano al Sol, se oculta la mayor parte del tiempo bajo el intenso brillo solar. Sin embargo, en fechas específicas, su posición permite verlo y sacar fotos con mayor claridad, ofreciendo un espectáculo astronómico breve pero fascinante.

Cuándo se podrá ver a Mercurio en agosto

El próximo momento propicio para observar y fotografiar a Mercurio será el 19 de agosto. En esta ocasión, el planeta alcanzará su mayor separación aparente del Sol, fenómeno conocido como “elongación máxima”. Esto permitirá que sea visible durante un corto período, ya sea en el amanecer o en el atardecer, dependiendo de su ubicación relativa respecto al astro rey.

Este evento ocurre aproximadamente cada tres o cuatro meses y alterna entre apariciones matutinas y vespertinas. En esta oportunidad, la visibilidad se dará poco después de la puesta del sol, cuando el cielo comience a oscurecerse lo suficiente para que el planeta destaque en el horizonte.

A qué hora es ideal para sacar fotos de Mercurio

El horario más adecuado para sacar fotos de Mercurio coincide con el crepúsculo, cuando el cielo todavía conserva algo de luz y el contraste con el planeta es más equilibrado. El 19 de agosto, el momento clave será entre 30 y 45 minutos después de la puesta del sol.

En este lapso, la luz solar indirecta disminuirá lo suficiente como para no opacar la visión del planeta, pero sin llegar a la oscuridad total, que puede dificultar su ubicación. Es fundamental contar con un lugar de observación con vista despejada hacia el horizonte occidental y sin contaminación lumínica excesiva.

Tips para fotografiar a Mercurio con éxito

Para lograr imágenes nítidas y bien definidas de Mercurio, se recomienda seguir algunas pautas que pueden marcar la diferencia:

  • Usar trípode: estabiliza la cámara y evita el desenfoque por movimiento.

  • Configurar ISO medio-bajo: reduce el ruido en la imagen, especialmente si se fotografía en condiciones de baja luz.

  • Apertura moderada: un valor f/5.6 o f/8 suele ofrecer buen equilibrio entre nitidez y luminosidad.

  • Enfoque manual: ayuda a fijar el punto exacto sobre el planeta, evitando que el sistema automático se confunda con el cielo.

  • Tiempo de exposición corto: como Mercurio se mueve rápidamente en el cielo, un tiempo demasiado largo podría generar trazos en lugar de puntos definidos.

  • Utilizar teleobjetivo o zoom óptico: para obtener un mayor acercamiento sin perder calidad.

Quienes cuenten con telescopios con adaptadores fotográficos pueden lograr resultados aún más detallados, captando no solo el brillo del planeta sino también su forma definida.

El mejor momento para fotografiarlo: Entre 30 y 45 minutos después del ocaso, durante el crepúsculo

Un fenómeno breve pero imperdible

La visibilidad de Mercurio en elongación máxima es limitada, tanto en duración como en frecuencia. Por eso, cada oportunidad se convierte en un momento único para quienes disfrutan de la observación astronómica o desean sumar imágenes poco comunes a sus colecciones fotográficas.

En agosto, el cielo ofrecerá uno de esos instantes donde ciencia y belleza coinciden, permitiendo contemplar al planeta más cercano al Sol y capturarlo en fotos que reflejen su singularidad.

El 19 de agosto, la recomendación es preparar el equipo con anticipación, ubicar un buen punto de observación y aprovechar al máximo esos minutos en los que Mercurio se dejará ver, brillando sobre el horizonte como una joya fugaz.