La leyenda de Michael Schumacher comenzó con el GP de Bélgica 1991, cuando se subió al Jordan 191 como reemplazante de Bertrand Gachot, aunque no pudo terminar la carrera debido a una falla en el embrague tras la largada. No obstante, el hecho de haber clasificado séptimo en su primera prueba de clasificación llamó la atención de Flavio Briatore, que no perdió un segundo en ficharlo para Benetton de cara a la siguiente fecha del campeonato.
Fue así como el expiloto alemán continuó su carrera en la Fórmula 1 con otros colores a partir del GP de Italia para las últimas cinco fechas del calendario, que finalizó en el decimocuarto lugar con cuatro puntos. Tres años después de su debut, Schumacher levantó su primer título en 1994 y lo volvió a conseguir en la temporada siguiente antes de su partida a Ferrari, donde tuvo la seguidilla de cinco consagraciones al hilo entre el 2000 y 2004.
Si bien “Schumi” pasó a ser un rival de Briatore cuando se marchó a la escudería italiana, el ahora director de Alpine siempre mantuvo una buena relación con su estrella, aunque hubo un corte tras el trágico accidente a finales del 2013. El 29 de diciembre de dicho año, el germano se accidentó mientras practicaba esquí en los Alpes franceses y desde entonces quedó postrado bajo el cuidado de su familia, que mantiene en secreto el estado de Schumacher.
Aunque hubo algunos exsocios del “Káiser” que tuvieron la oportunidad de visitarlo tras aquel suceso, Briatore no quiso volver a ver el rostro del siete veces campeón del mundo. Así lo reveló en una reciente entrevista con Corriere della Sera, en la que reconoció que prefiere mantener el feliz recuerdo de los tiempos que pasaron juntos en la máxima categoría, aunque sí mantiene el contacto con Corinna, la esposa de Michael.
“Si cierro los ojos le veo sonriendo después de una victoria, y prefiero recordarle así que tumbado en una cama. Con Corinna, sin embargo, hablamos a menudo”, afirmó Briatore. También el italiano reconoció que Schumacher forma parte de su recuerdo más especial en la F1 durante la temporada de 1994: “Teníamos a la Federación en contra. Ferrari y McLaren no estaban contentos de que les ganara un chaval de 19 años y un equipo cuyos propietarios hacían camisetas”.
Briatore y la caída de Schumacher
Después de ganar su séptimo campeonato del mundo con Ferrari en 2004, Michael Schumacher no pudo alcanzar la octava corona en 2005, año en que se alzó otro de los formados por Flavio Briatore. Se trata de Fernando Alonso, que levantó dos títulos seguidos con Renault, a lo que le siguió el retiro del alemán en 2006, aunque volvió unos años después para tener tres temporadas en el naciente Mercedes entre 2010 y 2012.