Como era de esperar, el Gobierno no reconoció los errores propios y culpó a la oposición y los bancos por la suba del dólar. El ministro de Economía, Luis Caputo, le apuntó indirectamente a los bancos por la suba del dólar al explicar el proceso por el cual se produjo la baja de interés que presiono sobre el tipo de cambio. “Las LEFIs se suponía que los bancos las iban a canjear por LECAPS. Pero los bancos, temerosos de perder la liquidez diaria, no fueron con todo y prefirieron hacer numerales”, dijo Caputo a través de redes sociales.
El ministro afirmó que “al sobre encajar todos al mismo tiempo, estaba claro que eso iba a derivar en una baja de la tasa corta, por lo cual el Banco Central empezó a absorber esa liquidez excedente”. Caputo reveló que la licitación que se realizará hoy para absorber parte de la liquidez que se liberó –cerca de $ 10 billones- fue pedida por los bancos.
“La absorción vía licitación del Tesoro es mejor opción, porque son pesos que van a la 2020. Pero en el mientras tanto, ya que esos pesos liquidan el viernes próximo, el BCRA absorbió 5 billones en los últimos 3 días hábiles, siendo que la prioridad siempre fue, es y será, que no sobren pesos, de manera de consolidar el proceso de desinflación que estamos transitando”, completó el ministro.
El posteo del ministro desató una serie de apoyos y cuestionamientos. Caputo sigue optando por una comunicación unidireccional en redes sociales sin aceptar repreguntas para clarificar los puntos que quedan difusos.
Semanas cambiarias calientes
El Banco Central salió a tomar pases remunerados para controlar el exceso de pesos que se mantiene en el mercado. El objetivo es aflojar la presión sobre el dólar, pero, a pesar de todos los esfuerzos, no lo logró. La divisa volvió a subir pese a una intervención récord en el mercado de futuros.
El dólar denominado Comunicación A3500, que se utiliza para liquidar operaciones como los contratos futuros y es la referencia de los operadores mayoristas, estuvo en el arranque de la jornada en los 1.300 pesos y cerró otra vez en alza a 1.277 pesos, aunque en el final de la rueda tuvo un leve retroceso hasta los 1.258 pesos con los que abrirá la rueda del miércoles.
Toda la presión extra sobre la divisa estuvo originada en el exceso de pesos que se registra en el mercado por la mala praxis del equipo económico que pretendió cambiar radicalmente la política monetaria, que significó una emisión del 30% de la base monetaria.
La decisión tomada el jueves pasado, cuando el BCRA dejó de colocar LeFi para absorber el exceso de pesos de los bancos y el Tesoro no logró capturar esos fondos con una licitación de deuda, significó que más de 10,5 billones de pesos estén líquidos desplomando las tasas en pesos y acelerando la dolarización de carteras.
El equipo económico del presidente Javier Milei y el ministro Luis Caputo entendió por las malas que en la economía argentina siempre hay pesos para comprar divisas y que la famosa dolarización endógena no pasa de una declaración vacía de contenido, cuestionada y descalificada por el propio Fondo Monetario Internacional. Por eso, la Secretaría de Finanzas convocó el lunes a una licitación de deuda fuera de cronograma para capturar esos pesos, que se concretará este miércoles y se liquidará este viernes, con lo que la inestabilidad podría extenderse un par de jornadas más.