Caída en la producción olivícola: crece la preocupación en La Rioja frente al ajuste nacional

Desde la provincia determinaron que la situación se debe a una combinación entre una baja producción y la volatilidad del mercado internacional.

03 de agosto, 2025 | 15.00

El presidente de la Cámara de Industriales Olivícolas, José Hilal, advirtió sobre la preocupante caída en la recaudación del sector olivícola en La Rioja, afectado por la combinación de una baja producción y la volatilidad del mercado internacional.

Hilal explicó que los precios de la aceituna y del aceite de oliva en Argentina están sujetos a las variaciones externas, lo que obliga a los productores locales a adaptarse constantemente. “Tenemos que tener la cintura suficiente para ir amoldándonos a las situaciones. Son épocas de estar muy alerta y tomar las decisiones adecuadas”, señaló.

En relación con la producción provincial, detalló que este año La Rioja alcanzó entre 30 y 35 millones de kilos de aceitunas de mesa y entre 50 y 60 millones de kilos para aceite, cifras muy por debajo del potencial productivo. “Una buena cosecha debería estar entre los 60 y 70 millones de kilos, estamos por debajo de la mitad”, remarcó.

Si bien la caída en la producción de aceite es menor, el dirigente enfatizó que la situación requiere del sector estrategias urgentes para sostener la rentabilidad y garantizar el desarrollo de la actividad.

La importancia de un mercado exportador fuerte

De acuerdo a la Federación Olivícola Argentina (FOA), la actividad ocupa a unos 6.000 trabajadores permanentes y cerca de 43.000 temporarios durante la época de cosecha. En los últimos dos años, el volumen producido se incrementó a pesar de una reducción en la superficie cultivada, y dos tercios del total se destinaron a la elaboración de aceite de oliva. Actualmente, hay cerca de 2.000 explotaciones olivícolas con destino a aceite y unas 1.800 orientadas a aceitunas en conserva.

En cuanto a las exportaciones, el complejo olivícola argentino generó ingresos por US$321 millones en el último año, según cifras del INDEC. Esa cifra representó un crecimiento interanual del 8,2% en términos reales, impulsado por el aumento en el valor de los productos, pese a una caída en volumen. El 61,2% de las ventas externas correspondieron a aceite de oliva, el 37,5% a preparaciones y el 1,3% a aceitunas de mesa. Los principales mercados fueron Brasil, Estados Unidos y la Unión Europea.

A nivel internacional, Argentina se ubica como el octavo exportador de aceitunas de mesa y el quinto de aceite de oliva. Desde mayo de este año, el sector no paga retenciones a las exportaciones, aunque el plazo para liquidar divisas se redujo de 30 a 15 días.