Lula se plantó ante Trump y cobrará impuestos a las empresas tecnológicas de EEUU

El presidente de Estados Unidos Donald Trump había amenazado a Lula con hacer efectivos aranceles al país por llevar adelante un juicio contra Jair Bolsonaro por intento de golpe de Estado. 

17 de julio, 2025 | 19.32

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, respondió a la provocación de Donald Trump de imponer aranceles al país para manifestarse en contra del juicio contra el ex mandatario Jair Bolsonaro por intengo de golpe de Estado. En un Congreso de la Unión Nacional de Estudiantes en el estado de Goiás, Lula afirmó que va a cobrar impuestos a las empresas tecnológicas norteamericanas. Más temprano en una entrevista con CNN se plantó contra Trump: "Ningún gringo me va a dar órdenes a mi. No. Yo tengo que respetar a mí país, yo soy el que manda en este país". 

El presidente brasileño también se quejó porque Estados Unidos no respondió aún ninguna de las propuestas arancelarias que envió en Planalto, en una apuesta por el diálogo. "No recibimos respuesta. La respuesta que recibimos fue el artículo publicado en el periódico, en su correo electrónico, en su WhatsApp, en su sitio web, porque ni siquiera se molestó en enviar una carta", dijo Lula ante el grupo de estudiantes. Después, lo chicaneó: "Estoy seguro de que el presidente estadounidense nunca ha negociado ni el 10% de lo que yo he negociado en mi vida", declaró. 

Lula volvió a responder a la posibilidad de que los productos brasileños sean gravados un 50 % a partir del 1 de agosto y recordó que inició su vida política en los sindicatos, en los que aprendió el arte de la negociación. Afirmó que, en una negociación, cada una de las partes debe ceder en algo para llegar a un consenso y subrayó que espera eso de Trump, para aclarar que el presidente de Estados Unidos debe entender que "no será un gringo el que le dé órdenes" a Brasil.

Además denunció que la guerra arancelaria contra Brasil es "política" y no tiene fundamentos. Un informe que publicó Amcham días atrás y citó OUL reveló que el superávit comercial con Brasil alcanzó los 1.700 millones de dólares, una cifra que aumentó en un 500% en comparación con el mismo período de 2024. Más tarde, en una especie de cadena nacional denunció que son "falsas" las declaraciones respecto de que Brasil lleva adelante prácticas comerciales "desleales" y explicó: "Estados Unidos acumula más de 15 años de robusto superávit comercial de 410 billones de dólares". 

Lula dijo que seguirán apostando a unas "bunas relaciones diplomáticas" no solo con Estados Unidos sino con todo el mundo. También defendió el sistema de pagos brasileros PIX que ayer Estados Unidos anunció que "investigará". "No aceptaremos un ataque a Pix, que es un patrimonio de nuestro pueblo. Tenemos el sistema de pagos más avanzado del mundo y vamos a protegerlo. Si es necesario usaremos todos los instrumentos legales para defender a nuestra economía incluida, la ley de reciprocidad aprobada por el Congreso nacional", sostuvo. 

También mostró su indignación por el apoyo que reciben las políticas agresivas de Estados Unidos por parte de líderes políticos locales, como Bolsonaro y sus seguidores. "Son traidores a la patria, no les importa la economía del país" lanzó. 

Impuesto a las empresas tecnológicas de Estados Unidos

En su discurso a estudiantes, Lula anticipó que avanzará con un gravamen y la regulación a las grandes empresas tecnológicas. "Quería decirles que juzgaremos y gravaremos a las empresas digitales estadounidenses. No aceptamos que, en nombre de la libertad de expresión, utilicen [las redes sociales] para agredir, mentir y causar daño", declaró. Un momento bisagra del gobierno de Lula fue su cruzada contra la red social X, de la que es dueño Elon Musk, porque no cumplía con una orden le había impuesto la justicia brasileña. 

Y luego sumó: "En Brasil ningúno está encima de la ley. Es preciso proteger a las familias de individuos y organizaciones que usan las redes para promover golpes y fraude, cometer crímenes de racismo, incentivar violencia contras mujeres y atacar la democracia". Y remató: "La defensa de la soberanía también se aplica a las plataformas digitales extranjeras en Brasil. Para operar en nuestro país, todas las empresas nacionales y extranjeras son obligadas a cumplir las reglas".