El papa León XIV realizó un contundente llamado a los líderes mundiales para que pongan fin a los conflictos que afectan a diversas regiones, instando a negociar un futuro de paz para todos los pueblos. El sumo pontífice hizo especial énfasis en la catástrofe humanitaria que atraviesa la Franja de Gaza.
"Sigo con gran preocupación la gravísima situación humanitaria en Gaza, donde la población civil está aniquilada por el hambre y sigue expuesta a la violencia y la muerte. Renuevo mi sincero llamamiento al alto el fuego, a la liberación de los rehenes y al pleno respeto del derecho humanitario", manifestó el Papa.
Al cerrar la oración del Ángelus dominical, León XIV expresó su profunda preocupación por la situación humanitaria en Gaza, así como por los enfrentamientos en la frontera entre Tailandia y Camboya y en el sur de Siria. Desde el estudio del Palacio Apostólico, León XIV manifestó su cercanía a quienes “sufren a causa de los conflictos y la violencia en el mundo”.
“Toda persona humana tiene una dignidad intrínseca que le ha sido conferida por Dios mismo: exhorto a las partes implicadas en todos los conflictos a reconocerla y a poner fin a las acciones contrarias a ella. Exhorto a negociar un futuro de paz para todos los pueblos y a rechazar todo lo que pueda perjudicarlo. Encomiendo a María, Reina de la paz, las víctimas inocentes de los conflictos y los gobernantes que tienen el poder de ponerles fin”, indicó.
El llamado a la paz del Papa
El Papa aseguró que sus oraciones son por los afectados en la frontera entre Tailandia y Camboya, “especialmente por los niños y las familias desplazadas”, y pidió que “el Príncipe de la Paz inspire a todos a buscar el diálogo y la reconciliación”. Asimismo, extendió sus oraciones a las “víctimas de la violencia en el sur de Siria”.
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El ataque a la iglesia en Gaza fue por una falla en el proyectil, según Israel
Tras el ataque israelí a la parroquia de la Sagrada Familia en Gaza, que causó la muerte de tres personas y heridas a diez, las autoridades israelíes se disculparon y abrieron una investigación sobre el incidente, prometiendo que los resultados de la investigación serían rápidos y fiables.
Según el informe de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), publicado el último jueves en Jerusalem Post, el disparo contra la iglesia se debió a un fallo del proyectil o del mecanismo de la pieza de artillería que lo lanzó. Por consiguiente, no se puede atribuir ninguna responsabilidad individual y nadie enfrentará sanciones, ni penales ni disciplinarias.
Las FDI no aclararon la naturaleza del fallo, añadiendo que, no obstante, el incidente justifica la mejora de las normas que rigen la apertura de fuego cerca de lugares especialmente sensibles. Cabe añadir que, en los últimos 22 meses de guerra, en ningún otro incidente similar —como los que implicaron la muerte de voluntarios humanitarios y rescatistas extranjeros, trabajando para ONG o bajo la bandera de la ONU— se determinó responsabilidad alguna ni se ha sancionado a ningún soldado.