Los trabajadores de una importante empresa textil viven un difícil momento, ya que el dueño decidió cerrar la fábrica sin previo aviso, en medio de la crisis económica que generó el gobierno de Javier Milei.
Ante esta situación, los empleados de la textil Blanco Nieve, ubicada en el parque industrial de Río Grande (Tierra del Fuego), decidieron ocupar la planta de manera pacífica en busca de una respuesta.
"Nos presentamos a trabajar en nuestro horario normal y habitual, como corresponde, y nos encontramos que la planta estaba cerrada, sin habernos dicho nada desde la empresa, ninguna cosa, en absoluto", relató Marcela Cárdenas, integrante de la conducción del Sindicato de Obreros de la Industria del Vestido (SOIVA) a medios locales.
En esa línea, agregó: "Nos tratamos de comunicar con Recursos Humanos y nos dijeron que la empresa no iba a abrir más. No hubo explicación, ni siquiera una charla previa con los trabajadores. Fue una canallada del dueño, una sinvergüenzada más".
Esto se da en el marco de un duro momento que atravesaba la empresa, que tiene deuda con los trabajadores quienes sostenían la planta a través de la venta directa de productos allí elaborados para cubrir los ingresos.
"Era algo que estaba hablado, nosotros vendíamos los productos para cobrarnos el sueldo, porque todavía se adeuda septiembre. Hasta ayer (jueves pasado) estábamos vendiendo y de un momento a otro, sin previo aviso, decidió cerrar la empresa", agregó la delegada gremial.
Los trabajadores quieren evitar que desmantelen la fábrica
La empresa tenía las cuentas embargadas por deudas con proveedores y el dueño había prometido regularizar los pagos con los trabajadores una vez que se solucione el problema, sin embargo, los empleados aseguran que pese a que se liberaron las cuentas, los pagos nunca llegaron.
"Fueron siempre puras mentiras, desde el 11 de septiembre no se depositó nada. Todo lo que conseguimos fue gracias al esfuerzo de los trabajadores", sumó Cárdenas y marcó que la toma de la empresa fue para exigir explicaciones y resguardar la maquinaria de la planta.
En ese sentido, relató que a los empleados les preocupa que se vacíe la planta, como sucedió con otras en el Parque Industrial: "Hemos visto empresarios que cuando llegan los problemas se escapan como ratas. Nosotros estamos acá para cuidar lo nuestro, para que no se lleven nada y para que nos paguen lo que deben".
Los trabajadores resolvieron seguir con la medida de venta de productos a precios accesibles, como una forma de poder cobrar parte de sus salarios ante la nula respuesta de la empresa.
