Este martes por la madrugada, se llevó a cabo en La Plata la resolución del jury contra Julieta Makintach, donde se declaró a la jueza culpable de haber participado en el documental ilegal durante el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona. De esta forma, se confirmó que Makintach dejará el cargo y estará inhabilitada de forma permanente en el ámbito judicial. Bajo ese contexto, durante el mediodía del mismo martes, el abogado Rodolfo Baqué presentó formalmente el primer pedido de jury contra los colegas de Makintach, Maximiliano Savarino y Verónica Di Tomasso, de quienes se sospecha que sabían del documental desde un primer momento.
En un escrito en el cual se señala que el accionar de Makintach fue advertido por personal policial y por la secretaria del tribunal, y que ante esto los jueces decidieron no tomar medidas, Baqué expresa: "Di Tomasso y Savarino sabían de la existencia de personas no autorizadas dentro de la sala de debate con cámaras de filmación y permitieron que eso continúe. No denunciaron esa irregularidad ni dejaron constancia al respecto, como así tampoco informaron a las partes".
La presentación contra Savarino y Di Tomasso
En su presentación contra los integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro, el denunciante sostiene que todo el accionar de Makintach, el cual incluye ser la protagonista del documental no autorizado "Justicia Divina" y utilizar su cargo para facilitar el acceso de personas que formaban parte del proyecto al tribunal, incluso en días inhábiles, era de total conocimiento de los otros dos jueces que componían el tribunal.
De esta manera, Baqué añadió entre las pruebas para el pedido de jury la declaración del subsecretario de Comunicación y Medios de la Suprema Corte, Ezequiel Ernesto Klass, quien confirmó que Di Tomasso sabía de la existencia de la cámara que ingresó a la sala el primer día: "La interlocutora del tribunal que me preguntó por esa cámara y si nosotros le habíamos dado permiso fue Di Tomasso, ella siempre hablaba en plural, como que me refería también a Savarino, como que era una inquietud de ambos, me decía ‘con Maxi queríamos saber’, algo así".
Otra de las pruebas fundamentales que el letrado expuso fue el testimonio de la secretaria del Tribunal, Laura Soledad Minici, quien aseguró haber informado a los jueces sobre la presencia de personas filmando sin autorización, sin embargo, estos le indicaron que permitiera su estadía, sin dejar constancia alguna.
Por último, Baqué argumentó que el accionar llevado a cabo por Savarino y Di Tomasso encuadran en las causales de remoción establecidas en la ley 13.661 sobre enjuiciamiento de magistrados y funcionarios de la provincia de Buenos Aires, adjudicando a ambos jueces los delitos en el cargo de incompetencia, negligencia, incumplimiento de deberes, y comisión de graves irregularidades. Por todo esto, se solicitó la suspensión preventiva de ambos magistrados y el inicio del proceso que podría derivar en su destitución.
