Una chica de 19 años recibirá una indemnización millonaria luego de que la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil confirmara la responsabilidad de un cirujano y de una mutual de salud por un insólito caso de mala praxis médica: la joven fue intervenida en la rodilla derecha cuando la cirugía estaba programada en la izquierda.
Una indemnización de más de 18 millones
El tribunal resolvió que la paciente deberá recibir más de 18 millones de pesos en concepto de incapacidad física y psicológica, daño moral y tratamiento terapéutico. La suma total se desglosa en $12 millones por incapacidad psicofísica, $6 millones por daño moral, $144 mil por terapia y $50 mil por gastos médicos y traslados.
Los jueces Gastón Polo Olivera y Carlos Carranza Casares destacaron que la negligencia fue clara y que la mutual debía responder solidariamente por el accionar del médico, dado que era parte de la prestación de salud contratada.
El caso de la chica de 19 años a la que le operaron la rodilla equivocada
La historia comenzó cuando la joven consultó por dolores en su rodilla izquierda y, tras estudios médicos, se programó la cirugía. Sin embargo, al ingresar al quirófano en julio de 2015, el traumatólogo primero operó la rodilla contraria, que no presentaba patología en ese momento.
Recién después se intervino la rodilla izquierda, como estaba previsto, lo que derivó en complicaciones posteriores y en la necesidad de una artroscopía de urgencia. El consentimiento informado firmado por la paciente solo mencionaba la cirugía en la rodilla izquierda.
Durante el proceso judicial, la mutual negó la existencia de mala praxis y sostuvo que la joven había inducido al especialista a operar la rodilla derecha. El profesional también rechazó las acusaciones, mientras que la aseguradora sostuvo que el consentimiento había sido válido y que ambas rodillas estaban comprometidas.
Sin embargo, el perito de la causa fue categórico: calificó la primera intervención como una “iatrogenia negativa innecesaria”. El tribunal concluyó que la operación en la rodilla equivocada fue producto de negligencia e impericia médica. Además, remarcó que la mutual debía responder por el error de ese profesional.