Monóxido de carbono: cómo evitar accidentes por intoxicación, consejos y recomendaciones

La concientización sobre los peligros del monóxido de carbono y la aplicación de estas recomendaciones son claves para reducir los casos de intoxicación.

08 de mayo, 2025 | 10.46

El monóxido de carbono es un gas altamente tóxico que puede causar graves consecuencias para la salud si no se toman las medidas de prevención adecuadas. La intoxicación ocurre de manera silenciosa, ya que esta sustancia carece de color, olor y sabor. Para reducir los riesgos de accidentes por intoxicación, es fundamental conocer su origen y cómo actuar ante una posible exposición.

Por qué el monóxido de carbono representa un peligro silencioso

El monóxido de carbono se genera por la combustión incompleta de materiales como gas, kerosén, leña o carbón. En el hogar, los artefactos como estufas, calefones, hornos, calderas o cocinas a gas pueden producirlo si no cuentan con una correcta ventilación o si presentan fallas en su funcionamiento. También pueden emitirlo los vehículos con el motor en marcha o las brasas encendidas en espacios cerrados.

Lo más alarmante de este gas es que no puede ser detectado por los sentidos humanos. A diferencia de otras sustancias tóxicas, no provoca ardor en los ojos ni tiene olor característico, lo que dificulta advertir su presencia. Según datos difundidos por Metrogas, los síntomas de una intoxicación pueden incluir dolor de cabeza, náuseas, mareos, desvanecimientos y, en casos extremos, la muerte. La exposición prolongada o en altas concentraciones es potencialmente letal.

Señales de alerta y condiciones que pueden favorecer la intoxicación

Algunas señales físicas pueden advertir la presencia de monóxido de carbono en el ambiente, como una llama amarilla o anaranjada en los artefactos de gas, manchas oscuras o decoloración cerca de estos aparatos y conductos de evacuación deteriorados o desacoplados. Estos indicios deben ser tomados en cuenta para realizar una revisión inmediata del sistema de calefacción o cocción.

El origen de los accidentes por intoxicación suele estar asociado a varios factores. Entre ellos, se destacan la instalación de artefactos en espacios inadecuados, la obstrucción de las rejillas de ventilación, la acumulación de hollín en los quemadores o la falta de mantenimiento periódico. El mal estado de los conductos o su desconexión accidental también puede derivar en una acumulación peligrosa del gas.

Por qué el monóxido de carbono es tan peligroso y cómo identificar su presencia en el hogar

Recomendaciones de seguridad para prevenir accidentes por monóxido de carbono

Para evitar situaciones de riesgo, Metrogas recomienda que toda instalación y mantenimiento de artefactos a gas sea realizada exclusivamente por gasistas matriculados. El correcto funcionamiento de estufas, calefones y cocinas debe comprobarse con frecuencia, especialmente durante los meses fríos, cuando se incrementa el uso de estos dispositivos.

Es esencial garantizar que los ambientes donde hay combustión cuenten con ventilación cruzada y continua. Las rejillas de ventilación no deben obstruirse bajo ninguna circunstancia. Además, los conductos de evacuación de gases deben estar en buen estado, bien conectados y libres de obstrucciones. Ante cualquier sospecha de escape o mal funcionamiento, debe suspenderse el uso del artefacto y solicitar la revisión profesional correspondiente.