Trastorno de Compra Compulsiva: cómo afecta a tu vida y qué hacer para evitarlo

Las redes sociales se convirtieron en parte de nuestra vida y convivimos con ella en lo cotidiano. Sin embargo, algunas pueden generar deseos innecesarios y volver a las personas irresponsables financieramente.

16 de septiembre, 2025 | 20.55

En la era de las redes son cada vez más los jóvenes que comparten videos que reseñan los productos que compran en línea o en locales físicos. Este tipo de contenidos se conoce como haul, y los hay de varios tipos: de ropa, de marcas de cosméticos y maquillaje, de skincare, de libros, entre otros.

Sin embargo, muchas veces estos consumos son innecesarios porque los usuarios no precisan de estos artículos y tienden a stockearse con una gran cantidad de productos, pero para otros se convierte en una adicción que afecta a su economía.

¿Por qué hago compras en exceso?

Conocido como el Trastorno de Compra Compulsiva, la oniomanía se trata de un comportamiento desadaptativo, persistente e irresistible. En ocasiones puede traer consecuencias negativas al individuo y a su entorno.

La edad de inicio del trastorno se ubica entre los 18 y 30 años. Según un artículo publicado por Dominica Díez Marcet y Ana Valdepérez Toledo en Cuadernos de Medicina Psicosomática y Psiquiatría (2015), el curso del trastorno tiende a ser crónico, con episodios recurrentes de frecuencia mensual.

En la mayoría de los casos, los pacientes describen que su estado de ánimo es negativo, como un desencadenante de la conducta de compra, pero en ocasiones los estados de ánimo positivos también son citados como desencadenantes.

La prevalencia en la población general entre un 1% y un 11,3%, y es más frecuente en mujeres que en hombres, estos tienen a comprar objetos instrumentales y de ocio relacionados con la independencia y la actividad, las mujeres suelen comprar más objetos asociados con la apariencia y el bienestar emocional.

¿Cómo tratar el Trastorno de Compra Compulsiva?

El tratamiento incluye terapias variadas que buscan modificar el comportamiento y mejorar el control de impulsos. Algunas de estas combinan las estrategias cognitivas con métodos farmacológicos y de autocontrol.

  • Terapia cognitivo-conductual y reestructuración cognitiva

Se debe acudir a un profesional de la salud mental que aplique la terapia cognitivo-conductual (TCC). Esta se centra en identificar y modificar patrones de pensamiento irracionales que impulsan el comportamiento compulsivo. Entonces, a los pacientes se les enseña a reconocer estas distorsiones cognitivas, promoviendo el desarrollo de un pensamiento más racional.

  • Tratamiento farmacológico

En este caso suelen recetarse antidepresivos y estabilizadores del ánimo que se usan para el tratamiento de síntomas subyacentes como la ansiedad o la depresión, que pueden acompañar el trastorno compulsivo. Este tratamiento, al igual que los otros, deben ser supervisados por un profesional de la salud mental.

  • Estrategias de autocontrol y técnicas de relajación

El autocontrol se basa en el fortalecimiento de las habilidades que permiten a los individuos resistir el impulso de comprar compulsivamente, por ejemplo, establecer límites financieros, la planificación de compras y el uso de diarios para el monitoreo de gastos. En lo que respecta a técnicas de relajación, se incluyen la meditación y respiración profunda, que puede reducir la ansiedad vinculada con la urgencia de comprar.

Estrategias para planificar compras

Entre las estrategias para realizar comprar destacan establecer un presupuesto y aprender a manejar el dinero. Además, de tener un acompañamiento del entorno social (familia y amigos) que brinden el afecto que las personas necesitan.

Tener un presupuesto es clave para quienes luchan contra la compulsión de comprar. Por ello es clave tener un bien definido y que identifique cuáles son las prioridades y necesidades reales frente a estos deseos impulsivos.