El lado "enfermizo" de la Fórmula 1 que llevó a George Russell a encabezar la GPDA por más seguridad

El piloto británico es el líder de la Grand Prix Drivers' Association, la organización que lucha por mejorar las condiciones de los pilotos en la F1. Que lo impulsó a sumarse.

12 de agosto, 2025 | 19.58

La Fórmula 1 es un deporte de riesgo debido a las altas velocidades en las que se maneja, por lo que los accidentes siempre son una posibilidad y han sido causas de algunas de las pérdidas más dolorosas del deporte. Esto llevó a la formación de la Grand Prix Drivers' Association en 1961 como respuesta a los cuatro fallecimientos de 1958, considerada la temporada más trágica en la historia de la máxima categoría.

Desde entonces, la GPDA trabaja para mejorar las condiciones de seguridad de los pilotos, aunque siempre en un espacio de lucha que muchas veces no fue reconocido por la FIA. De ahí que hayan continuado los trágicos accidentes, como el de Ayrton Senna en 1994 o, ya entrados en el siglo XXI, el de Jules Bianchi al colisionar con una grúa mal posicionada en el GP de Japón 2014.

Claro que hubo otros sucesos que no llegaron a ser mortales, como el incendio del monoplaza de Romain Grosjean en el GP de Baréin 2020, cuando llegó a escapar del Haas con el cuerpo encendido en llamas. De hecho, ese es uno de los momentos que han quedado grabados en la retina de George Russell, quien por entonces corría con Williams y ahora es el líder de la GPDA tras el retiro de Sebastian Vettel y del mismísimo Grosjean.

El británico trabajó en su desarrollo como piloto con Billy Monger, que perdió las piernas en 2017 tras un accidente en la F4 Británica, y también vio en directo el choque fatal de Anthoine Hubert en la F2 del 2019. “Fue enfermizo de ver. Cuando experimentas cosas como esta con personas que conoces tan bien, y crees que tienes ideas que pueden ayudar a mejorar la seguridad o evitar que eso suceda, entonces naturalmente quieres compartirlo”, expresó el piloto de Mercedes en una reciente entrevista con Autosport.

Además, el inglés reconoció que el incendio de Grosjean fue un momento determinante para involucrarse más profundamente en la GPDA. “El accidente de Romain Grosjean lo vi. Estaba delante de mí y le pasé, y todavía veo la imagen en mi cabeza ahora. Miré por el retrovisor y todo lo que pude ver fueron llamas. Se apoderó de todo mi espejo”, relató el inglés, que considera que fue un suceso que pudo pasarle a cualquiera de los pilotos de la grilla.

Claro que la F1 evolucionó mucho desde entonces, en especial con la introducción del halo de seguridad en 2018, que ha sido impulsado por la GPDA, aunque tuvo resistencias desde varios lados. Solo basta recordar los accidentes entre Max Verstappen y Lewis Hamilton en 2021, uno de ellos con el Red Bull encima del Mercedes, o el vuelco de Guanyu Zhou en Silverstone en 2022.

El choque entre Hamilton y Verstappen sucedió en Monza.

El papel de Netflix en la seguridad de la F1

George Russell también reconoció que la Fórmula 1 ingresó en una nueva era en lo respectivo a la seguridad con el acuerdo con Netflix para la serie Drive to Survive. No solamente los pilotos están más unidos, sino que también la importancia de la serie ha hecho que se mejoren las condiciones por la exposición de la competencia: “Todo lo que ha sucedido con el deporte a nivel comercial, con Netflix y estando expuestos a mucho más como atletas e individuos (…) ha dado a los pilotos temas de conversación que queremos abordar juntos”.