En el mundo del automovilismo, competir en la Fórmula 1 es el sueño máximo de cualquier piloto. Sin embargo, llegar a la categoría reina del deporte motor no solo requiere talento, perseverancia y resultados: también es imprescindible contar con un permiso especial llamado Superlicencia de la FIA. Este documento, que garantiza la preparación y experiencia del piloto, es una condición excluyente para formar parte de la parrilla de la F1.
La Superlicencia no es algo nuevo: fue implementada en 1990 para establecer un filtro de calidad entre quienes pretendían participar en un Gran Premio. No obstante, a partir de 2015 el sistema se volvió más estricto luego del impactante debut de Max Verstappen con apenas 17 años y sin licencia de conducir convencional. Desde entonces, la FIA elevó los requisitos: impuso una edad mínima, estableció una puntuación obligatoria y sumó exámenes teóricos y pruebas prácticas.
Para competir oficialmente en la Fórmula 1, no alcanza con tener destreza al volante: es necesario cumplir con una serie de condiciones que la FIA considera fundamentales para garantizar la seguridad y el nivel del espectáculo. Desde obtener puntos en campeonatos previos hasta demostrar conocimientos reglamentarios, el camino hacia la Superlicencia es cada vez más exigente y costoso.
¿Qué requisitos se necesitan para obtener la Superlicencia de la FIA?
La Superlicencia de la FIA es la credencial más importante del automovilismo profesional. Sin ella, ningún piloto puede participar en sesiones de clasificación ni carreras oficiales de F1. Para conseguirla, se deben cumplir estos puntos esenciales:
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Tener al menos 18 años de edad.
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Poseer una licencia de conducir válida y sin antecedentes negativos (es decir, que no haya sido suspendida).
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Contar con una licencia internacional de piloto de Grado A.
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Aprobar un examen teórico con preguntas reglamentarias de la F1.
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Haber disputado al menos dos temporadas en categorías competitivas.
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Realizar 300 kilómetros de test en un monoplaza reciente de Fórmula 1.
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Sumar un mínimo de 40 puntos en el sistema de puntuación oficial en los últimos tres años.
Este sistema de puntos se basa en el desempeño en otras categorías previas a la F1. Por ejemplo, consagrarse campeón de Fórmula 2 o de IndyCar otorga directamente los 40 puntos necesarios. En cambio, quienes compiten en otras disciplinas como Fórmula 3, Super Fórmula o campeonatos regionales deben combinar buenos resultados durante al menos dos o tres temporadas para alcanzar la cifra requerida. Cabe destacar que los rallys no aportan puntos para esta licencia.
¿Cuánto cuesta acceder a una Superlicencia?
Además de los requisitos deportivos, obtener una Superlicencia implica una inversión económica importante. El costo base es de 10.400 euros. Pero a eso se le suma un monto adicional de 2.100 euros por cada punto de campeonato conseguido en la temporada anterior. Es decir, un piloto que haya obtenido 100 puntos en su última temporada de F1 deberá pagar más de 220.000 euros para renovar su licencia.
La Superlicencia funciona como un filtro riguroso para garantizar que los pilotos de F1 estén preparados técnica, física y mentalmente. Y si bien es una barrera difícil de superar, representa también un sello de élite para quienes logran alcanzar el pináculo del automovilismo mundial.