Netanyahu afirmó que el documento que publicó la ONU denunciando hambruna en Gaza es "una mentira descarada" contra Israel

Netanyahu respondió al informe que la ONU difundió sobre Gaza. Lo acusó de ser una "mentira descarada" y volvió a decir que "la política de Israel no es de hambre".

23 de agosto, 2025 | 13.42

En el marco del informe que publicó Naciones Unidas este viernes 22, en el que confirmaron la existencia de una hambruna en Gaza, el gobierno de Benjamin Netanyahu lo calificó como "una mentira descarada" y aseguró que Israel "no tiene una política de hambruna", sino que "su política es prevenirla". Según la versión israelí, desde el inicio de la guerra en octubre de 2023 se permitió la entrada de aproximadamente dos millones de toneladas de ayuda humanitaria a Gaza, equivalentes a una tonelada por persona.

El documento, elaborado por la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF, por sus siglas en inglés), señala que "más de medio millón de personas enfrentan condiciones de inanición, miseria y muerte" en el enclave palestino, por lo que la situación ya puede catalogarse como una hambruna.

El comunicado de la oficina de Netanyahu asegura que los problemas de distribución no son responsabilidad de Israel, sino consecuencia del accionar de Hamás. Según la versión oficial, muchos camiones cargados con alimentos y medicinas fueron saqueados antes de llegar a los centros de distribución, mientras que una parte de la ayuda habría sido desviada por el propio movimiento islamista para financiar sus operaciones militares.

Además, el gobierno israelí aseguró que la escasez de alimentos fue atendida con "lanzamientos aéreos, entregas marítimas, rutas de transporte seguras y puntos de distribución operados por empresas estadounidenses". De esta manera, el Ejecutivo buscó contrarrestar las acusaciones de un supuesto bloqueo intencional para provocar hambre en la población civil.

La confirmación de la ONU: hambruna extendida y cifras alarmantes

En contraposición, la CIF confirmó que la hambruna ya está presente en la Gobernación de Gaza, la cual incluye la ciudad más poblada del enclave y que se expande hacia Deir al-Balah y Khan Younis. El informe estimó que, hacia finales de septiembre, unas 640.000 personas vivirán en condiciones catastróficas, mientras que otros 1.14 millones afrontarán niveles de emergencia en seguridad alimentaria.

Las autoridades sanitarias gazatíes reportaron que, desde el inicio de la guerra, al menos 273 personas murieron por hambre y desnutrición, entre ellas 112 niños. Los datos reflejan el impacto devastador del conflicto en una franja ya castigada por años de bloqueo, precariedad y violencia.

Repercusión internacional por la situación en Gaza

El informe y la respuesta israelí marcan un nuevo punto de fricción en el tablero internacional. Mientras la ONU insiste en que el hambre se utiliza como arma de guerra y podría configurar un crimen de lesa humanidad, Israel busca reafirmar su posición de que cumple con las obligaciones humanitarias y que la crisis responde a la manipulación de Hamás.