Inundaciones repentinas en Texas dejan muertos y desaparecidos

04 de julio, 2025 | 17.30

Tormentas eléctricas y lluvias torrenciales provocaron el viernes inundaciones repentinas en las riberas del río Guadalupe, en el centrosur de Texas, lo que provocó la muerte de varias personas mientras otras muchas estaban desaparecidas, según las autoridades locales, que no quisieron dar cifras.

Entre los desaparecidos había un número indeterminado de niños atrapados por las aguas que arrasaron campamentos.

"Todo el mundo está haciendo todo lo que está en su mano para sacar a estos niños", dijo el juez del condado de Kerr, Rob Kelly, en una rueda de prensa sobre el desastre.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

Kelly dijo que las autoridades tenían algunas cifras preliminares de víctimas mortales, pero no quiso revelar un número específico hasta que se sepa más del alcance. Medios de comunicación locales informaron de que al menos seis personas habían muerto.

El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos declaró la emergencia por inundaciones repentinas en partes del condado de Kerr, situado en el centrosur de Texas Hill Country, a unos 65 kilómetros al noroeste de San Antonio, tras fuertes aguaceros de hasta 30 centímetros de lluvia.

La Oficina del Sheriff del Condado de Kerr informó de "inundaciones catastróficas" en la zona, con el resultado de varias personas desaparecidas y "pérdida de vidas confirmada".

El vicegobernador de Texas, Dan Patrick, dijo que estaba coordinando con el equipo de respuesta de emergencia del estado sobre las inundaciones.

"Se pronostican más lluvias en esas áreas. Incluso si la lluvia es ligera, puede haber más inundaciones. Hay una amenaza continua de posibles inundaciones repentinas desde San Antonio a Waco durante las próximas 24 a 48 horas, además de los riesgos continuos en el oeste y centro de Texas", dijo Patrick en una publicación en X.

(Redacción e información de Steve Gorman en Los Ángeles; contribución de Ismail Shakil en Ottawa; edición en español de Javier López de Lérida)