La Iglesia católica salió con un duro comunicado contra el Gobierno por el operativo de seguridad que monta todos los miércoles contra los jubilados y jubiladas que pelean por recomponer sus haberes cuya mínima ronda los $355 mil pesos, incluyendo el bono de $70 mil que está clavado desde hace más de un año. En la carta que lleva la firma de la Comisión Nacional de Justicia y Paz y de la Episcopal de Pastoral Social hicieron un pedido enfático para que el Gobierno "convoque a todos los sectores representativos de la comunidad para resolver su delicada situación" e inicie un diálogo.
En la misiva las dos comisiones que responden a la Iglesia expresaron su "repudio" a la represión sostenida cada miércoles e insistieron en la "legitimidad" del reclamos de los jubilados por la insuficiencia de sus haberes. "La violencia nunca es la respuesta ante el ejercicio del derecho a reclamar que reconoce nuestra Constitución. Pero esa violencia es mucho más grave cuando se ejerce contra quienes reclaman por una injusticia grave, como la de reducir los haberes jubilatorios de nuestros mayores". Asimismo pidieron que se cumpla el derecho a protesta y afirmaron que el "diálogo" es "siempre la mejor respuesta ante un reclamo".
Y cerraron con una cita del papa Francisco: “Cuando la sociedad abandona en la periferia una parte de sí misma, no habrá programas políticos ni recursos policiales o de inteligencia que puedan asegurar indefinidamente la tranquilidad”.
El miércoles pasado la Policía Federal golpeó y gaseó por segunda vez al cura de Opción por los Pobres, Paco Olveira, quien marcha miércoles a miércoles en apoyo a los cientos de jubilados que copan la plaza y se enfrentan al operativo de seguridad que comanda la ministra Patricia Bullrich. "Estábamos ahí en la primera fila dando la vuelta al Congreso como todos los miércoles y en un momento empezaron a empujarnos fuertes hacia la vereda, tiraron a una de las jubiladas, nos acercamos a ella y lo agarraron al compañero y yo últimamente me agarro al que se quieren llevar preso y yo siempre salgo en libertad", había dicho Paco luego de haber sido retenido en una de las últimas marchas.