Un jubilado de 76 años murió en un hospital de la ciudad de Junín esperando un marcapasos de PAMI que nunca llegó. Su hijo denunció la "crudeza" de la obra social que demoró hasta cinco días en conseguir ese insumo por "falta de stock". Desde el organismo admitieron una tardanza de cuatro días, pero aseguraron que se actuó con "celeridad y eficacia" y responsabilizaron al centro médico por no contar "con la complejidad necesaria para abordar" el caso.
"Mi viejo se fue con la ilusión de que yo le había conseguido el marcapasos, yo le mentí para que se quede contento. Le dije 'viejo quedáte tranquilo, ya lo tenemos, mañana te van a operar'. Estaba contento, feliz. Se quedó con esa ilusión ,de un marcapasos que nunca llegó", dijo Matías Canzonetta en diálogo con El Destape 1070.
En su relato, el hijo del jubilado fallecido contó que el jueves 21 de agosto por la noche su padre se descompuso mientras tomaba mate en su casa. Fue llevado al Hospital Interzonal General de Agudos Dr. Abraham Félix Piñeyro, en la ciudad bonaerense de Junín, donde lo atendieron en la guardia y luego lo alojaron en terapia intensiva, al detectarle una insuficiencia cardíaca.
Tras horas de atención, los médicos lo estabilizaron y le pidieron a Matías que consiguiera un marcapasos DDD para que pueda dejar la sala de terapia y volver a su vida normal, con los cuidados correspondientes. "El viernes 22 de agosto ya tenía todos los papeles para pedir el marcapasos del PAMI", indicó su hijo. Sin embargo, el dispositivo nunca llegó.
"Realizo el tramite y en el transcurso del día me dicen que no había stock de marcapasos en la ciudad", apuntó, y se quejó de la inacción del organismo en una ciudad que tiene 100 mil habitantes, es cabecera de partido, y reúne a miles de adultos mayores.
Pese a la falta de respuestas, Matías insistió y accedió a hablar con responsables de la obra social en el distrito, a quienes les advirtió que su padre "se estaba muriendo" y que necesitaba ese insumo de manera urgente. "La crudeza de PAMI fue tremenda. Primero diciéndome 'tranquilo tu papa se va a salvar, no va pasar nada'. Y después diciendo 'estos son los tiempos, esto es lo que podemos hacer'", detalló.
Tras todo el fin de semana sin novedades, el hijo del jubilado fallecido consiguió un marcapasos para retirar el martes 26 de agosto en ciudad de Buenos Aires, a cientos de kilómetros de distancia, pero su padre no resistió. "Iba a salir con un grupo de amigos a las 2 de la mañana. A la 1 de la mañana sonó el teléfono de casa. Me avisaban que mi viejo hizo un paro y murió", relató.
La respuesta del PAMI
Desde la obra social indicaron a El Destape que "el centro de médico al que fue ingresado el afiliado no contaba con la complejidad necesaria para abordar adecuadamente" el caso del jubilado. "Sin embargo, fue igualmente admitido, en lugar de ser derivado a otro centro de salud", planteó el PAMI en su descargo.
Además, el organismo dio su versión de cómo fue el pedido del marcapasos, el cual "se desarrolló con celeridad y eficacia". "Se solicitó un marcapasos, y a los tres días se rectificó el pedido, solicitándose un dispositivo distinto. Cabe destacar que, a las cinco horas de realizada esta segunda solicitud, la autorización ya había sido aprobada y el dispositivo se encontraba en proceso de entrega para el día siguiente. El procedimiento administrativo se desarrolló con celeridad y eficacia, como es habitual de las vías de excepción", señalaron.
La obra social también pidió "esclarecer la causa final del deceso" del hombre. "PAMI solicitó el acceso a la historia clínica del paciente, y aún está esperando respuesta conforme a los plazos legales establecidos", remarcaron..