Despidieron 300 trabajadores y mientras protestan, la empresa ya busca reemplazarlos

Los trabajadores sostienen que la empresa busca reemplazarlos con empleados que tengan menos derechos laborales y menor sueldo. 

09 de septiembre, 2025 | 15.35

En medio de la crisis económica que generó el gobierno de Javier Milei, 300 trabajadores fueron despedidos de una histórica fábrica de porcelanatos y mientras los damnificados reclaman por su situación, la firma lanzó una convocatoria para cubrir los puestos

A principios de mes la fábrica de porcellanato que la empresa ILVA tiene en el Parque Industrial Pilar cerró sus puertas y no dejó ingresar a los trabajadores. Poco días después empezaron a llegar los telegramas de despidos y se dio la reacción de los perjudicados para recuperar su fuente de ingresos.

"Por falta de materia prima, los portones se cierran y no se abren más”, afirmaron los empleados a El Diario de Pilar. Además, explicaron que el conflicto no es nuevo, ya que en los últimos meses hubo varios despidos, pagos de aguinaldo en cuotas y suspensiones rotativas

La firma presentó un Procedimiento Preventivo de Crisis ante el Ministerio de Trabajo, pero fue rechazado y los trabajadores sostuvieron que pese a esto se adquirieron nuevas maquinarias.

Pese a argumentar una crisis, ILVA busca reemplazar a los trabajadores

Pese a esto, mientras los trabajadores realizan distintas protestas, la firma lanzó una búsqueda laboral en distintos sitios para reemplazar a los despedidos. Allí se detalla que la firma puestos de supervisor de producción, representante comercial, operarios y supervisores eléctricos, entre otros, con experiencia en hornos o manejo de clarks.

Es una bofetada, están ofreciendo nuestros puestos de trabajo”, expresó el delegado y empleado de la empresa Marcelo Barrionuevo. También sostuvo que quienes tomen esos lugares "lo harán en condiciones diferentes, sin los derechos que nosotros teníamos y sin las conquistas que habíamos logrado a través de los años". 

En ese sentido, detalló que los trabajadores despedidos contaban con una antigüedad que otorgaba la empresa que brindaba dinero adicional, así cómo servicio de comedor y transporte, tickets canasta y demás beneficios que los nuevos ya no contarán. También afirmó que desaparecía la modalidad de trabajo “4×4”, que es de cuatro días laborales seguidos de otros cuatro de descanso y en cambio los nuevos cobrarían “el mínimo global disponible: es decir, una cifra de alrededor de 650 mil pesos, muy por debajo de la línea de la pobreza”

Ante esto los trabajadores llevan más de una semana de acampe donde también advierten que les deben el sueldo del último mes trabajado. "No les pagaron a todos la quincena ni el salario mensual. Recién cuando el tema salió en los medios empezaron a depositar, pero algunos compañeros recibieron $125, una cargada".

Los trabajadores denuncian que la empresa buscan reducir los derechos laborales y los sueldos.