El Senado italiano le dio media sanción al decreto con el que el gobierno de Giorgia Meloni busca restringir las condiciones de naturalización por derecho de sangre al limitarla a dos generaciones. Hace unos meses, la primera ministra le dio la ciudadanía al presidente Javier Milei.
Así, la regla que impulsa la primera ministra italiana y que afectaría a miles de argentinos quedó cerca de quedar firme con el voto a favor de 81 senadores, mientras que 37 se opusieron. El texto, que pasó a la Cámara de Diputados, podría terminar de tratarse la semana que viene.
"Es muy importante”, dijo a la prensa el canciller Antonio Tajani. El decreto, expresó, “pretende devolver la dignidad y el sentido a un derecho que debe basarse en un vínculo auténtico con Italia, no solo burocrático, sino también cultural, cívico e identitario”.
En qué consiste el decreto de Meloni
Hace algunas semanas, Meloni firmó el decreto que perjudicaría a miles de argentinos que tienen ascendencia italiana y que tenían el deseo de contar con la ciudadanía de ese país. A partir de esta iniciativa, se requiere tener padre o abuelo nacido en Italia para solicitar la nacionalidad, cuando antes era suficiente un bisabuelo o un tatarabuelo, según la reforma de la "Ius sanguinis" adoptada en el consejo de ministros.
Las condiciones deberán ser aun más duras, pues después "se impondrá a los ciudadanos nacidos y residentes en el extranjero" y naturalizados italianos "mantener lazos reales con nuestro país, ejerciendo los derechos y los deberes de los ciudadanos al menos una vez cada 25 años", dice el texto. Esos derechos y deberes, sin embargo, no fueron explicados.
"El principio del derecho de sangre no será abolido y muchos descendientes de emigrantes podrán obtener la nacionalidad italiana", aseguró en su momento Antonio Tajani, luego del consejo de ministros. "Pero se establecerán límites precisos, especialmente para evitar los abusos o la comercialización de los pasaportes italianos. La nacionalidad debe ser una cosa seria", agregó.
Citan a Argentina para justificar la regla, pero Meloni le entregó la ciudadanía a Milei
El gobierno italiano puso como ejemplo a la Argentina, que tiene la comunidad de inmigrantes italianos más importante fuera de Italia, donde 20.000 descendientes obtuvieron la nacionalidad en 2023 en virtud del derecho de sangre y 30.000 en 2024. Uno de ellos fue precisamente el presidente argentino, Javier Milei, de buena relación con la titular del gobierno del país europeo.
En noviembre pasado, Milei recibió a Meloni en Casa Rosada, dieron una conferencia juntos y luego cenó con ella en la Quinta de Olivos. En diciembre, fue Milei quien viajó a Italia para ser recibido por la dirigente de la extrema derecha de ese país. En Roma, Meloni le otorgó la ciudadanía de ese país tanto a Milei como a su hermana Karina, en reconocimiento a la “descendencia”.