El truco casero y sencillo para limpiar las frutas y verduras

Descubrí cómo con dos ingredientes que seguro tenés en tu casa podes mantener las frutas y verduras limpias y seguras. 

26 de mayo, 2025 | 16.06

Cada vez son más los hogares que adoptan un truco casero, simple pero efectivo para limpiar las frutas: la mezcla de agua con sal. Esta técnica, que ganó popularidad en redes sociales, permite detectar la presencia de larvas de moscas.

"Sumergir las frutas en agua con sal ayuda a identificar si hay larvas en su interior", explicaron los especialistas. Esto sucede porque los insectos suelen dejar sus huevos en la superficie de las frutas, donde luego se desarrollan. Sin embargo, los expertos aclararon que estas larvas son inocuas para la salud.

A la hora de limpiar frutas de cáscara dura, como las manzanas, se recomienda simplemente lavarlas bajo el agua. "Los expertos aconsejan pelarlas antes de consumirlas para mayor seguridad", aseguraron. Para llevar a cabo una limpieza correcta, el primer paso fue enjuagar las frutas durante al menos 30 segundos bajo el agua de la canilla, utilizando un cepillo blando o frotando entre las manos.

Después, hay que secarlas bien con una toalla de papel o un paño limpio antes de guardarlas en el frutero. Para frutas de cáscara más delicada, como peras, frutillas o ciruelas, se necesita un cuidado adicional. "Es recomendable lavarlas con agua corriente, sumergirlas en agua potable con unas gotas de lavandina y enjuagarlas bien", indicaron los expertos, similar a cómo se hace con las verduras, para asegurar su seguridad.

Sal y agua, los ingredientes para limpiar las frutas y verduras.

El truco infalible para eliminar la grasa de tus ollas

¿Sos de los que se desesperan al ver esas molestas líneas de grasa en la olla? No te preocupes, hay un truco casero que te va a salvar y solamente necesitás ingredientes que todos tenemos en casa. Este método se volvió viral por su increíble efectividad.

Para esto solamente se necesitan tres elementos: Limón, sal y detergente. Primero, hay que cortar un limón por la mitad y exprimirlo sobre la zona con grasa. Después, espolvorear un poco de sal, formando una pasta arenosa que ayuda a aflojar la suciedad.

Luego de eso hay que sumar unas gotas de detergente lavaplatos y dejar que esa mezcla haga su magia durante entre 5 y 10 minutos. Con una esponja, preferentemente de fibra verde, hay que frotar en movimientos circulares y luego enjuagar con agua caliente para que quede todo reluciente. Por último, hay que secar con un paño limpio.

Este truco no solo es fácil, sino que también es súper eficiente. El limón tiene ácido cítrico que es ideal para descomponer la grasa, mientras que la sal funciona como un abrasivo suave que no raya. Y ni hablar del detergente, que se encarga de disolver toda la mugre acumulada. Además, a diferencia de otros métodos como el vinagre y el bicarbonato, que en ocasiones no logran eliminar la grasa más pegada, este combo es ideal para superficies metálicas y acero inoxidable, dejando tus ollas con su brillo original y sin residuos molestos.