WhatsApp dejará de estar exenta de publicidad y comenzará a incorporar anuncios, promociones y suscripciones pagas en los próximos meses. Tras más de una década de evitar el modelo publicitario, la plataforma busca monetizar su enorme base de usuarios, siguiendo los pasos de Instagram y Facebook, que desde hace años muestran publicidad en sus interfaces.
Las novedades se concentrarán principalmente en la pestaña de “Novedades”. Esta sección funciona como un espacio para descubrir contenidos y nuevos canales, donde los usuarios pueden seguir publicaciones efímeras (“Estados”) y los llamados “Canales”, que permiten recibir mensajes unidireccionales de creadores, medios de noticias, equipos deportivos y empresas.
Promociones y suscripciones en los Canales de WhatsApp
Entre las principales funciones que llegarán se incluyen las difusiones promocionadas, que permitirán a los administradores destacar sus canales dentro del directorio, y las suscripciones pagas, con las que los usuarios podrán acceder a actualizaciones exclusivas de sus creadores u organizaciones favoritas. Además, empresas y canales podrán pagar para aparecer en los Estados, facilitando que los usuarios inicien conversaciones sobre productos o servicios directamente desde la app.
A pesar de estos cambios, WhatsApp mantiene su promesa de privacidad. Los mensajes, llamadas y estados personales seguirán cifrados de extremo a extremo, lo que garantiza que nadie, salvo el destinatario, pueda verlos o escucharlos. Esta información no se utilizará para mostrar anuncios ni para influir en la publicidad que recibe cada usuario.
Según Nikila Srinivasan, responsable de mensajería empresarial de Meta, esta actualización permitirá “ayudar a la gente a descubrir nuevos canales y dar a los administradores la posibilidad de promover sus contenidos para atraer más seguidores”.
Con estas actualizaciones, WhatsApp da un paso decisivo hacia la monetización, consolidando un modelo que hasta ahora había evitado. Se trata del impulso económico más significativo en la historia de la app, y marca un cambio importante en la estrategia de Meta, que ahora integra herramientas publicitarias y de suscripción sin comprometer la privacidad de los usuarios.
Principales preocupaciones de los usuarios
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Publicidad en una app que hasta ahora era “limpia”: muchos usuarios se sienten incómodos con la incorporación de anuncios, después de más de una década sin ellos.
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Pagos por contenido: las suscripciones a canales generan inquietud sobre tener que pagar para acceder a ciertas actualizaciones o información que antes era gratuita.
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Impacto en la experiencia de uso: la aparición de anuncios en Estados y promociones en canales podría afectar la sensación de simplicidad y rapidez que caracteriza a WhatsApp.
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Privacidad y manejo de datos: aunque Meta asegura que los mensajes y llamadas seguirán cifrados, algunos usuarios temen que la publicidad pueda comprometer la privacidad o generar seguimiento indirecto de su actividad.