La Monstera deliciosa, es una de las especies tropicales más buscadas para decoración de interiores. Si ya tenés una en casa y querés sumar otra a tu colección o regalar una planta, la buena noticia es que podés propagarla vos mismo. Eso sí: hacerlo correctamente es clave para no dañar la planta madre y asegurar que los nuevos brotes crezcan sanos.
El horticultor y diseñador botánico Nathan Heinrich explica que existen dos métodos principales para multiplicar una monstera: enraizamiento en agua y en sustrato. En ambos casos, la preparación del esqueje es el primer paso esencial.
El paso a paso para preparar el esqueje
- Comenzá con una planta sana. Asegurate de que tenga tallos fuertes y hojas verdes sin signos de plagas o enfermedades.
- Elegí bien el lugar del corte. La planta madre debe conservar al menos tres hojas después de cortar.
- Cortá con precisión. Cada esqueje debe tener al menos un nudo foliar (de donde brotan hojas o raíces). Heinrich recomienda cortar 1,27 cm por debajo del nudo inferior y 1,27 cm por encima del superior, cuidando de no dañar la yema latente, que es clave para el crecimiento.
Método 1: Enraizar en agua
- Es la forma más simple de propagar tu monstera.
- Colocá los esquejes en un recipiente con agua limpia, en un lugar con luz brillante pero indirecta.
- Cambiá el agua regularmente para evitar la formación de algas.
- Una vez que las raíces midan al menos 5 cm, trasplantá a una maceta con tierra, usando una estaca para sostener el tallo y manteniendo la humedad constante en el sustrato.
Método 2: Enraizar en sustrato
- Ideal para reducir el riesgo de pudrición.
- Llená un recipiente con agujeros de drenaje y un sustrato ligero y aireado (como musgo sphagnum o perlita).
- Insertá el esqueje en el sustrato y mantenelo húmedo pero no encharcado.
- Cuando las raíces se hayan desarrollado bien (en 2 a 4 semanas), trasplantá a una maceta más grande con tierra para plantas de interior.
Cuidados posteriores
Recordá que la monstera es una planta tropical. Necesita luz indirecta abundante, humedad ambiental y riego regular. Dejá que la tierra se seque casi por completo antes de volver a regar y evitá la luz solar directa que puede quemar sus hojas. Con paciencia y siguiendo estos pasos, podés llenar tu hogar de nuevas monsteras saludables y vibrantes.
La histórica planta que está en todos los hogares y previene problemas de salud
En las últimas horas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) destacó la importancia de fomentar el uso de la medicina natural para ciertos dolores, ya que pueden servir para su tratamiento, así como para prevenir problemas e incluso mejorar el aspecto de la piel. Es por esto, que se recomienda cultivar plantas medicinales, ya que hay varias que son sencillas de cuidar y pueden crecer hasta en un balcón pequeño, o en una terraza.
Una de las opciones terapéuticas más conocidas es la fitoterapia, donde se usan plantas medicinales que que tienen efectos positivos sobre la salud. Esto fue validado científicamente y de hecho hay varios tipos de plantas que se utilizan para la fabricación de fármacos, por sus grandes beneficios como el alivio digestivo y la mejora de la piel.
El jengibre
Esta milenaria planta tiene numerosos beneficios para la salud, como el alivio natural de resfriados y gripe e incluso la congestión nasal. La mejor forma de consumirla es en un té con canela y limón, lo que crea una mezcla de sabor picante y exquisito aroma. Además, ayuda a la digestión, reduciendo las náuseas, mejorando la circulación y disminuyendo la posibilidad de migrañas. También, sirve para combatir el estrés y el envejecimiento, optimizando la absorción de nutrientes.
El aloe vera
Esta planta suele ser muy común en interiores y es una gran ayuda para la piel porque estimula la producción de colágeno, protegiéndola del sol y actuando como fotoprotector, evitando las arrugas. Por otro lado, es hidratante y alivia irritaciones, quemaduras, psoriasis y picaduras de insectos, ya que hidrata los tejidos y contiene vitaminas y minerales que son absorbidos de forma inmediata por la piel.