Alegría en el folklore por el anuncio del Cosquín de Peñas 2025: ¿Cómo será el clásico ritual de invierno?

Este mes se realizará una nueva edición del Cosquín de Peñas que se convirtió, desde hace dos décadas, en una cita obligada para los amantes de la música y la danza del folklore.

30 de junio, 2025 | 16.18

En Cosquín, la cultura popular respira los 365 días del año. Si bien el Pre Cosquín y el legendario Festival Nacional de Folklore se roban la atención en enero, el Cosquín de Peñas se consolidó como un imperdible del invierno para los que vibran con la música y la danza de raíz. Como ya es costumbre desde hace casi dos décadas, julio será el mes de una nueva edición de este ritual invernal.

El Cosquín de Peñas 2025 se extenderá por tres fines de semana, arranca el viernes 11 y se extiende hasta el domingo 13 de julio, continúa del viernes 18 al domingo 20, y culmina del viernes 25 al domingo 27, con escenarios desparramados en espacios gastronómicos, centros culturales y cada rincón de la Capital Nacional del Folklore.

La grilla completa, que incluirá a artistas locales, regionales y nacionales –entre ellos, ganadores de las últimas ediciones del Pre Cosquín y de los Espectáculos Callejeros–, se dará a conocer en los próximos días. La gran novedad de este año es la incorporación de los patios al circuito clásico, sumando un encanto especial.

El broche de oro del Cosquín de Peñas será el sábado 26 de julio con un evento diurno en la Plaza Próspero Molina, que tendrá como cabeza de cartel a Facundo Toro y destacados músicos invitados. La entrada, por supuesto, será libre y gratuita.

Durante esos fines de semana, la localidad del valle de Punilla se llenará de música, danza y tradiciones, tanto de día como de noche. Habrá también los ya clásicos “ataques peñeros”: intervenciones artísticas sorpresa en locales comerciales y espacios al aire libre para deleite de los visitantes.

El Fogón Criollo tendrá espectáculos a diario, mientras que el resto de los escenarios irán rotando con propuestas que fusionarán la música popular y la gastronomía. Lugares como Verlin, La Encrucijada del Supaj Ñuñú, Las Vegas, Club de ajedrez, Date el Gusto, Nueve Lunas, Varsovia, y el emblemático Patio de la Piry –un clásico de Cosquín desde hace más de 20 años– serán algunos de los espacios que se sumarán a la fiesta.

El Cosquín de Peñas nació para generar una propuesta invernal con el folklore y las tradiciones como eje central.

Pero la experiencia no termina ahí. También habrá el Paseo de los Artesanos, ferias de manualistas y microemprendedores (Meprem), el Museo del Artesano en la misma Próspero Molina, propuestas para niños y familias, encuentros temáticos y experiencias diseñadas para todas las edades.

Cosquín de Peñas: una tradición invernal que se mantiene más vigente que nunca

El Cosquín de Peñas nació en 2008 con la intención de crear una propuesta invernal centrada en el folklore y las tradiciones. Aunque su origen tuvo un fuerte componente comercial, impulsado por el sector turístico y gastronómico junto a la Comisión Municipal de Folklore, con el tiempo se fue consolidando hasta convertirse en un evento clave del calendario coscoíno.

“Todo comenzó planteando peñas en diferentes espacios que tenían su protagonismo durante el Festival, pero que durante el invierno y gran parte del año costaba que mantengan la llama encendida”, explica Emiliano Lucero, actual coordinador del evento, según la gacetilla oficial.

Una de las claves artísticas siempre fue la rotación de los músicos por los distintos espacios. “Esos tres o cuatro artistas se van trasladando de peña en peña. Es decir que el encuentro produce esa magia de que un artista puede estar en la misma jornada actuando un rato en un espacio gastronómico y luego en otro con un perfil más cultural. Y este año se le suman los patios, un emblema de Cosquín”, agrega Lucero.

Un elemento fundamental para el crecimiento del Cosquín de Peñas fue la creación de una “canasta peñera”, que unificó los precios de platos típicos como el locro y las empanadas. “De esa forma se generó un gancho gastronómico para el visitante, que de esa manera puede ir conociendo los distintos espacios en los diferentes días, con entrada libre y gratuita y precios más que razonables”, finaliza Lucero.