Flow es una película animada independiente que estrenó en 2024. Es dirigida por Gints Zilbalodis y coescrita con Matīss Kaža. La historia está cargada de símbolos, reflexiones e historia profunda que invita a reflexionar en temas que van desde la responsabilidad con la naturaleza hasta la capacidad de enfrentar los miedos.
La película, de coproducción belga, letona y francesa, se estrenó en la sección Un Certain Regard en el festival de cine de Cannes. Desde ese momento se convirtió en un fenómeno y conquistó al público y a la crítica. Ganó el Globo de Oro y el Oscar a Mejor Película Animada, siendo además la primera cinta letona en obtener ese reconocimiento.
¿De qué trata "Flow"?
La historia transcurre en un mundo postapocalíptico cubierto por el agua, donde un gato gris oscuro llamado Flow (que en letón significa “corriente”) despierta solo y atraviesa paisajes inundados. Se encuentra con otros animales como un perro labrador, un lémur coleccionista, un capibara pacífico y un ave secretaria, y juntos emprenden una travesía en barco, enfrentan desafíos naturales y aprenden a convivir sin diálogos, confiando en la expresión visual y sonora.
El final explicado de "Flow"
En el clímax, los animales enfrentan situaciones límite. El gato lucha por no ahogarse aferrándose a un árbol; el capibara casi sucumbe, pero sus compañeros lo salvan. Luego, una estampida de ciervos guía al gato hasta una visión impactante: la ballena que antes los rescató está varada y moribunda en medio del bosque. Esa escena simboliza la devastación ecológica y el daño irreversible a la naturaleza. Sin embargo, la escena poscréditos transmite esperanza: la ballena reaparece nadando libremente en el océano, lo cual sugiere que el ecosistema aún puede recuperarse si hay cambios.
Reflexiones sobre el final de "Flow"
- Fragilidad de la naturaleza: la ballena varada representa cómo los desastres ecológicos pueden dejar a la vida en desequilibrio.
- Resiliencia colectiva: el trabajo en equipo entre especies diferentes destaca la capacidad de adaptación ante la adversidad.
- Esperanza frente al colapso: la reaparición de la ballena significa que, pese al daño, el mundo puede sanar.
- Responsabilidad ecológica: el mundo destruido se presenta como una advertencia sobre el impacto humano, porque incluso en ausencia de humanos, las secuelas persisten.
- Comunión visual-emocional: al carecer de diálogos, el peso narrativo de la película recae en imágenes y sonidos; el final refuerza que lo visual puede emocionar con profundidad.