Otra buena noticia para Lula: el desempleo en Brasil tuvo su punto más bajo desde 2012

El gobierno de Brasil reportó el punto más bajo del desempleo en el país desde el 2012. También reportaron un crecimiento en la economía formal, que llevó al nivel de ocupación a uno de los más alto de la historia del país carioca.

17 de septiembre, 2025 | 20.29

Según datos oficiales del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), la tasa de desempleo se redujo al 5,6 % en el trimestre móvil mayo-julio, lo que representa el nivel más bajo desde que comenzó la serie histórica en 2012. Esta cifra no solo marca una mejora respecto al trimestre anterior, que fue del 6,6%, sino que también confirma una tendencia positiva en la recuperación del mercado laboral.

En este mismo período, Brasil registró 6,118 millones de personas desocupadas, la menor cantidad desde fines de 2013. Al mismo tiempo, el número de ocupados alcanzó un récord absoluto de 102,4 millones, lo que refleja "una expansión de la economía", de acuerdo a varios economistas al gobierno brasileño. Los analistas destacan que la creación de empleo se dio tanto en el sector formal como en actividades relacionadas con la agricultura, la ganadería y la pesca, que jugaron un papel clave en el crecimiento.

Además, el empleo con contrato formal se consolidó con 39,1 millones de trabajadores registrados, la mayor cifra en más de una década. El IBGE explicó que estos resultados demuestran la solidez del mercado laboral carioca, que no solo redujo la desocupación sino que también alcanzó un récord en la tasa de ocupación, con un 58,8 % de la población en edad laboral empleada.

Un mercado laboral en expansión y con mayor formalidad

Los resultados del IBGE fueron celebrados por economistas y especialistas del mercado de trabajo. El analista William Kratochwill destacó que la economía brasileña "se nota dinámica, resiliente y en expansión", ya que también se registró una disminución en la cantidad de personas fuera de la fuerza laboral. Estos indicadores evidencian un proceso de consolidación que podría sostenerse en los próximos meses si la tendencia continúa.

Uno de los puntos clave del informe fue el crecimiento del empleo formal, un dato fundamental en un país donde históricamente la informalidad fue elevada. El número de trabajadores registrados alcanzó un récord, mientras que la tasa de informalidad se redujo al 37,8%, la segunda más baja de la serie histórica. Solo en julio de 2020 se había registrado una cifra menor, lo que resalta la importancia del presente resultado.

Por otra parte, el número de trabajadores sin vínculo formal apenas varió, ubicándose en 38,8 millones. Sin embargo, el IBGE aclaró que ese movimiento no tiene relevancia estadística, lo que refuerza la idea de estabilidad en el mercado laboral.

Ingresos récord y mejora del poder adquisitivo

Además de la reducción del desempleo y el aumento de la formalidad, el informe del IBGE mostró un dato alentador para las familias brasileñas: el ingreso promedio se ubicó en un récord de 3.484 reales (aproximadamente 655 dólares). Esta cifra es un 1,3% mayor que en el trimestre previo y 3,8% superior respecto al mismo período del año pasado.

El aumento del ingreso real refuerza el poder adquisitivo de los trabajadores y representa un impulso adicional al consumo interno, uno de los motores centrales de la economía brasileña. Con estos datos, Brasil logra mostrar una mejora integral en el mercado laboral, combinando más empleo, mayor formalidad y mejores salarios.

Los analistas sostienen que si estas tendencias se consolidan, el país podría sostener un crecimiento más equilibrado y menos vulnerable a la volatilidad internacional. Por el momento, el récord de ocupación y la baja histórica del desempleo se convierten en un hito que marca un nuevo rumbo para el mercado de trabajo brasileño.