Israel avanza para dejar sin electricidad y agua a las instalaciones de la ONU

La ley obligaría a los proveedores a suspender o desconectar el servicio a cualquier propiedad de la ONU encargada de la ayuda humanitaria a los refugiados palestinos en la región.

19 de noviembre, 2025 | 15.41

El proyecto de ley respaldado por le Gobierno de Israel para prohibir el suministro de electricidad o agua a las instalaciones de la UNRWA, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos y sus descendientes, o gestionadas en su nombre, tuvo su primera aprobación en el parlamento (Knesset). 

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA por sus siglas en inglés) proporciona educación, atención médica y ayuda a millones de palestinos en Gaza, Cisjordania, Jordania, Líbano y Siria.

Israel alega que más del 10 por ciento del personal de la UNRWA en Gaza tiene vínculos con facciones terroristas, y que los centros educativos bajo los auspicios de la organización incitan sistemáticamente al odio contra Israel y glorifican el terrorismo.

La nueva enmienda formalizaría un proceso que obligaría a los proveedores de electricidad y agua a suspender o desconectar el servicio a cualquier propiedad cuyo nombre de consumidor registrado sea UNRWA, salvo que la parte registrada presente una declaración jurada de que no representa ni actúa en nombre de la agencia.

La legislación también propone permitir al gobierno confiscar propiedades en Ma'alot Dafna y Kafr Aqab en Jerusalén, que habían sido arrendadas a la UNRWA por el Estado y utilizadas como oficinas de la agencia, “sin necesidad de iniciar procedimientos legales o administrativos”.

La iniciativa tuvo 28 votos a favos y 8 en contra. El proyecto pasó a comisión, donde se preparará para lecturas adicionales antes de convertirse en ley.

La medida es una enmienda a un proyecto de ley aprobado por los legisladores en octubre de 2024, que prohíbe a la agencia operar en territorio israelí y restringe sus actividades en la Franja de Gaza y Cisjordania al prohibir a las autoridades estatales cualquier contacto con la agencia.

La agencia continuó funcionando durante algún tiempo después de la aprobación, pero sus instalaciones en Jerusalén Este finalmente cerraron.

¿Qué es la UNRWA?

La UNRWA fue creada en 1949 para proporcionar ayuda humanitaria, protección y servicios esenciales como educación y salud a los refugiados palestinos en la región. Desde la primera guerra Árabe-Israelí de 1948, cientos de miles de habitantes de la Palestina histórica y sus descendientes viven refugiados dentro de su propio territorio o en otros países de Oriente Próximo, como Siria, Líbano y Jordania.

Según la agencia de la ONU, se considera persona refugiada de Palestina a aquella “cuyo lugar de residencia habitual, entre junio de 1946 y mayo de 1948, era la Palestina histórica –el actual estado de Israel– y que perdieron sus casas y medios de vida como consecuencia de la guerra. Las descendientes de esta población son también considerados refugiadas por la Agencia”.

La UNRWA proporciona educación, atención médica y ayuda a millones de palestinos en Gaza, Cisjordania, Jordania, Líbano y Siria.

Los campos de refugiados en la Franja de Gaza y Cisjordania

Cisjordania

Cisjordania ocupa 5.500 kilómetros cuadrados, y cuenta con una población de unos 2,4 millones de personas, de las cuales más de 887.009 están registradas como refugiadas. Es decir, la cuarta parte de la población de palestinos refugiados en Cisjordania vive en los 19 campamentos que UNRWA gestiona en la zona

Franja de Gaza

Tras décadas de conflicto, y a causa del bloqueo impuesto por Israel desde 2007 y la ofensiva de Israel tras el 7 de octubre de 2024 que dejó el territorio devastado, la mayor parte de la población atraviesa graves dificultades. Al punto de que el 80% depende de la ayuda humanitaria para sobrevivir.

En unas condiciones así de extremas viven los más de 2 millones de habitantes de la franja de Gaza, de los cuales 1,7 millones son refugiados. La UNRWA proporciona educación, sanidad, servicios sociales, microcréditos y asistencia de emergencia a los refugiados por medio de más de 13.000 empleados que trabajan en más de 300 instalaciones repartidas en toda la Franja, entre los que se destacan 8 campamentos.