La estrella del Royal Ballet de Londres es argentina y su nombre es Marianela Núñez, quien fue condecorada personalmente por el Rey Carlos III con el título de Oficial del Imperio Británico por sus servicios a la danza. Un reconocimiento que llena de orgullo al país.
Marianela, con sus 43 años, lleva 28 temporadas como figura destacada del ballet británico, siendo considerada por la crítica internacional como una de las mejores bailarinas de su generación. "Por sus servicios a la danza", reza el motivo de la condecoración, pero en realidad es el premio a una vida dedicada al arte con pasión y excelencia.
De Villa Ballester al Teatro Colón
Nacida en Villa Ballester, en el partido de San Martín, la historia artística de Marianela comienza en el Instituto de Arte del Teatro Colón, donde ingresó siendo apenas una niña. Su talento era tan evidente que a los 14 años ya estaba bailando profesionalmente.
A los 16 años fue que recibió una invitación que cambiaría su vida: unirse al Royal Ballet de Londres. Lo que siguió fue una ascensión meteórica: a los 20 años ya 1ra Primera Bailarina, el máximo rango en una compañía de ballet.
El día que el rey la condecoró
La ceremonia en el Castillo de Windsor fue un momento cargado de simbolismo. Marianela eligió asistir acompañada de sus padres, quienes viajaron especialmente desde Argentina.
El outfit que usó para la ocasión no fue casual:
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Un elegante tapado rosa de la marca con la que colabora, llamado modelo "Odette" (como el cisne blanco de El Lago de los Cisnes)
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Una cartera de una firma favorita de la difunta Reina Isabel II
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Un tocado con plumas que evocaban al personaje de Odette
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Zapatos a medida diseñados para poder hacer la reverencia real con comodidad
Pero el momento más emotivo llegó cuando, al subir las escaleras del castillo, los músicos comenzaron a tocar "Por una cabeza", el famoso tango de Carlos Gardel. "Justo al llegar arriba empezó a sonar el tango Por una cabeza. Imaginate", confesó Marianela.
El legado artístico de una bailarina única
La carrera de Marianela Núñez está marcada por distinciones de élite en el mundo de la danza. Ganó cuatro veces como Mejor Bailarina en los prestigiosos Critics’ Circle Dance Awards (2005, 2012, 2018 y 2022) y recibió el Premio Olivier en 2013 por sus logros excepcionales en obras como Viscera y Aeternum.
Además, en Argentina fue galardonada con el Premio Konex de Platino (2009) como la mejor bailarina de la década y el Premio María Ruanova (2011), otorgado por el Consejo Argentino de la Danza.
Su talento la llevó a los escenarios más importantes del mundo, incluyendo la Scala de Milán, el Metropolitan de Nueva York, la Ópera de Viena, el Bolshoi de Moscú y el Royal Opera House de Londres. Como artista invitada, bailó con compañías de renombre como el American Ballet Theatre, el Ballet de la Ópera de Viena, el Ballet Estable del Teatro Colón y el Australian Ballet, consolidándose como una figura global del ballet clásico y contemporáneo.
Pero más allá de los premios, lo que define a Marianela es su versatilidad artística. Interpretó desde los roles clásicos más exigentes (como Giselle o La Bella Durmiente) hasta obras contemporáneas de vanguardia.
Bailó en el Bolshoi, La Scala y el Metropolitan Opera House.
Su vínculo con Argentina
Aunque vive en Londres desde hace casi tres décadas, Marianela mantiene un vínculo inquebrantable con su país. “Mi vínculo emocional con la Argentina es muy fuerte: allí están mi familia, mis seres queridos y tengo que seguir regando esas raíces porque es el lugar donde vine al mundo. Pero las que desarrollé aquí quizás tienen más fuerza", marcó.
"Son muchos años de pertenecer a una institución como el Royal Ballet, que me abrió sus puertas con una inmensa generosidad y donde nunca nadie me hizo sentir que venía de afuera”, recalcó.