La empresa biotecnológica Colossal Biosciences Inc., con sede en Dallas y valorada en 10.000 millones de dólares, anunció un avance espectacular en su proyecto de revivir animales extintos. En esta ocasión, la compañía logró la creación exitosa de tres lobos gigantes, también conocidos como "lobos terribles", una especie que no se veía en la Tierra hace más de 12.000 años y que fue popularizada por la famosa serie Games of Thrones.
Este avance de Colossal se suma a su objetivo inicial de resucitar al mamut lanudo. Aunque aún están trabajando en este proyecto, la empresa ya logró crear un ratón lanudo utilizando su tecnología de edición genética. Además de enfocarse en la resurrección de criaturas prehistóricas, Colossal destaca que su tecnología también puede ser aplicada en soluciones rentables para los sectores de la salud y la biodiversidad.
Los tres cachorros de lobo gigante, llamados Remus, Romulus y Khaleesi, en honor a un personaje de Juego de Tronos, actualmente residen en una reserva natural cercada en Estados Unidos, cuya ubicación no fue revelada. Estos pequeños lobos se alimentan con una combinación de carne de res, venado y caballo, además de recibir un pienso especialmente formulado para su crecimiento. A pesar de tener tan solo 6 meses de vida, ya miden casi 1,20 metros de largo y pesan 36 kilos. Se estima que podrían llegar a medir hasta 1,80 metros y pesar 68 kilos.
La creación de estos animales se hizo hecho basándose en ADN extraído de un diente de lobo gigante de hace 13.000 años y un cráneo de hace 72.000 años. Habrían Identificado 20 diferencias claves en 14 genes responsables de características distintivas del lobo gigante, como su mayor tamaño, un 20% mayor que los lobos grises, pelaje blanco, cabeza más ancha, dientes más grandes, hombros más poderosos y patas más musculosas.
Colossal sostiene que las mismas técnicas utilizadas para resucitar especies también podrían evitar la extinción de animales existentes en peligro. Aprendiendo de la restauración del mamut, la empresa busca diseñar elefantes más resistentes al cambio climático. Asimismo, recuperar al tilacino, un animal ya extinto, podría ayudar a preservar a su pariente marsupial, el quoll. Las técnicas utilizadas para restaurar al lobo terrible podrían aplicarse también en apoyo al lobo rojo, una especie en peligro de extinción.
Beth Shapiro, directora científica de Colossal, señaló que la humanidad está en un momento de evolución y que es nuestro deber decidir el futuro de estas especies. Según Shapiro y el director ejecutivo de la empresa, Ben Lamm, la ingeniería genética es una herramienta vital para revertir la pérdida de diversidad genética que se estima alcanzará el 30% para el año 2050, según el Centro para la Diversidad Biológica. Ambos aseguraron que la ingeniería genética no solo es un bien moral, sino también un imperativo moral para que los seres humanos se reconcilien con la naturaleza y reviertan las consecuencias negativas que han causado en el mundo.
Así es el aullido del lobo terrible
El equipo de Colossal compartió en redes sociales el video del primer aullido. “No es como el aullido de un lobo gris moderno. Tiene una resonancia más profunda, reflejo de su estructura física más robusta”, explicó la paleontóloga Angela Ferri.
Aunque el avance genera entusiasmo, también abre debates éticos y ecológicos. “No sabemos cómo interactuarán con los ecosistemas actuales o si podrían convertirse en invasores”, advirtió Rafael Labarca, biólogo de la Universidad Católica de Chile.