El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires oficializó el lanzamiento de la licitación nacional e internacional para la construcción de la Línea F del subte, el primer proyecto de una nueva traza en 25 años. Con una inversión estimada de 1.350 millones de dólares, se trata de la obra pública más costosa y estratégica del país, orientada a transformar la movilidad urbana en el eje sur-norte de la Capital.
El nuevo recorrido de 9,8 kilómetros conectará los barrios de Barracas y Palermo a lo largo de 12 estaciones, pasando por zonas densamente pobladas y de alta circulación como Constitución, Monserrat, Recoleta y San Cristóbal. Permitirá combinar con las seis líneas actuales del subte, el Ferrocarril Roca en Plaza Constitución y la línea San Martín en Palermo.
Según datos oficiales, se prevé que más de 300 mil pasajeros utilicen diariamente este nuevo ramal, que apunta a descongestionar la Línea C y a fortalecer la red de transporte público con mayor equidad territorial y eficiencia operativa.
El jefe de Gobierno, Jorge Macri, calificó el inicio del proceso licitatorio como un “paso histórico” y destacó que la obra será parte de un modelo de ciudad más integrada y moderna. "Dimos un paso histórico para la movilidad de la Ciudad: cumplimos con el plazo y lanzamos la licitación de la Línea F, la primera nueva línea de subte en 25 años", expresó.
Desde el Ministerio de Movilidad e Infraestructura remarcaron que hubo un alto interés por parte de empresas nacionales e internacionales, aunque no informaron los nombres de las mismas. “La Línea F será probablemente el legado más importante que le podemos dejar a Buenos Aires en términos de obra pública y movilidad. Vamos a tener una Ciudad más segura y mejor conectada, potenciando la intermodalidad y la centralidad de los barrios para el desarrollo urbano”, afirmó Pablo Bereciartua, ministro de Movilidad e Infraestructura porteño.
Se espera que los trabajos comiencen en 2026 y se complementen con otras iniciativas en marcha, como la compra de 214 nuevos coches para las líneas A, B y C, en el marco de un plan integral de renovación del subte porteño.