Durante la reciente cumbre de la OTAN en La Haya, los reyes Guillermo Alejandro y Máxima Zorreguieta se encontraron con Donald Trump en el majestuoso Palacio Huis Ten Bosch. En este encuentro, intercambiaron algunas palabras y se sacaron las tradicionales fotos oficiales. Aunque inicialmente pareció un encuentro protocolar más, la conversación pronto saltó a los titulares de todo el mundo.
La controversia estalló cuando un video del saludo cordial entre Trump y el soberano neerlandés Guillermo Alejandro comenzó a circular. Mientras posaban para las cámaras, Trump comentó: "Esa es la imagen que queremos". Por su parte, el rey expresó: "Bueno, ¡espero que hayas dormido bien!", a lo que el presidente contestó: "Muy bien, la casa es...", refiriéndose al lugar donde se alojó durante su visita a Países Bajos.
Mientras los hombres intercambiaban sonrisas y confidencias, la reina Máxima se mantuvo en un interesante segundo plano, escuchando lo que se decía. No obstante, pronto se transformó en la protagonista del momento al hacer un gesto que llamó la atención de todos. En las imágenes, la reina imitó el característico gesto que Trump suele hacer con la boca, lo que desató una ola de reacciones en redes sociales.
Las imágenes se volvieron virales casi de inmediato, y Máxima se transformó en objeto de debate. Algunos usuarios consideraron que su gesto fue un error propio de una reina, mientras que otros lo tomaron con humor, creyendo que fue simplemente una anécdota que añadió naturalidad al encuentro.
A nivel internacional, la prensa se hizo eco de esta curiosa anécdota, con diversos medios que opinaron sobre el gesto de la reina. Algunos sugirieron que pudo haber sido un acto involuntario o un intento de pronunciar alguna palabra, y no una burla intencionada. A día de hoy, ni los reyes ni Trump se pronunciaron oficialmente al respecto.
Importantes cambios en el encuentro entre el rey Carlos III y Donald Trump
El encuentro entre el rey Carlos III y Donald Trump que se dará en los próximos meses generó gran expectativa, ya que se confirmaron algunos cambios en la planificación de la reunión. Originalmente, la idea era que ambos se reunieran en un ambiente más relajado en una de las residencias escocesas del monarca.
Sin embargo, las apretadas agendas de ambos hicieron imposible esta opción, así que se cambió a un evento más formal. Según el medio People, ahora se baraja la posibilidad de que Trump reciba al rey en el emblemático Castillo de Windsor, donde se celebraría un banquete de Estado.
Además, se habla de que el príncipe William y su esposa, Kate Middleton, se sumarían a la recepción del presidente estadounidense, sumando un toque aún más especial a este encuentro. Es importante destacar que esta será la segunda visita de Estado de Trump al Reino Unido, un hecho sin precedentes para un líder político estadounidense.
En 2019, Trump fue recibido por la reina Isabel II, y se convirtió en el primer presidente en recibir este honor de parte de dos monarcas británicos. Aún no hay una fecha oficial para esta reunión, pero se espera que ocurra en septiembre de este año.