Final explicado de "El nudo del diablo", la película de gran éxito

“El nudo del diablo”: la histeria colectiva que se convierte en tragedia real.

17 de noviembre, 2025 | 09.51

La película El nudo del diablo (con título original Devil’s Knot), dirigida por Atom Egoyan, se basa en hechos reales: el caso de los “Tres de West Memphis”, tres adolescentes acusados de asesinar brutalmente a tres niños en Arkansas en 1993. La comunidad, atrapada por el pánico satánico, apunta de inmediato a Damien Echols, Jason Baldwin y Jessie Misskelley Jr., quienes son arrestados tras una confesión obtenida en un interrogatorio prolongado.

En la trama, el investigador privado Ron Lax (interpretado por Colin Firth) comienza a dudar de la versión oficial. Paralelamente, Pam Hobbs (Reese Witherspoon), madre de uno de los niños asesinados, vive un dolor profundo y una búsqueda incesante de justicia. La policía y los medios sembraron la idea de que los crímenes eran parte de rituales satánicos, incluso sin que existiera evidencia contundente que conectara a los adolescentes con lo ocurrido.

El final explicado de "El nudo del diablo"

En el desenlace de la película, los adolescentes son condenados: Baldwin y Misskelley reciben cadena perpetua, y Echols, la pena de muerte, basándose sobre todo en el testimonio de Misskelley tras horas de interrogatorio. Sin embargo, Lax logra encontrar una muestra de pelo en uno de los nudos que usaron para atar a las víctimas, cuyo ADN coincide con el de Terry Hobbs, padrastro de uno de los niños asesinados. Por otro lado, la película revela que la esposa del padre de otro de los niños muere en condiciones misteriosas, y que Pam Hobbs continúa su lucha por mantener viva la memoria de su hijo y buscar la verdad.

Legalmente, los tres acusados se benefician muchos años después de un acuerdo conocido como "Alford plea": admiten cargos, pero no reconocen su culpabilidad, lo que les permite salir de prisión tras haber cumplido tiempo.

"El nudo del diablo" (2013).

Lo más relevante de "El nudo del diablo"

Lo poderoso de esta historia radica en cómo aborda el miedo social y moral de la época del pánico satánico en Estados Unidos. La película no es solo un thriller criminal: es una crítica al sistema judicial, a los prejuicios y a cómo una comunidad dominada por el fanatismo puede condenar a inocentes por su aparente “otredad”. El personaje de Ron Lax representa la persistencia de la verdad frente a la narrativa dominante, mientras que Pam Hobbs encarna el dolor materno y la búsqueda de justicia a toda costa.

Además, emerge la figura de Terry Hobbs como un sospechoso alternativo. El hallazgo de su ADN en una hebra de cabello dentro de los lazos usados para atar a una víctima abre una grieta en la versión oficial, sugiriendo que quizá la justicia no solo fue errónea, sino manipulada.

El nudo del diablo es una película conmovedora y perturbadora. No solo reconstruye un crimen impactante, sino que invita a reflexionar sobre el poder del miedo, la responsabilidad social y legal, y las cicatrices que deja una condena injusta. Es un retrato sombrío de cómo una comunidad puede equivocarse, y de cómo la búsqueda de la verdad a veces requiere un coraje inmenso.