Flybondi es la aerolínea low cost más barata del país, por lo que sus recorridos ayudaron a que muchas personas puedan conocer el país con boletos accesibles. Sin embargo, en los últimos días dio a conocer que dejará de operar en una reconocida ciudad argentina y aseguró que "eliminó" la ruta aérea.
La famosa empresa aérea dio a conocer que, a partir del 16 de mayo, ya no operará en Río Gallegos, ya que se trataba de un recorrido "estacional". Esta novedad generó gran sorpresa entre los usuarios habituales de este recorrido, ya que no existió un anuncio previo de cierre y todo surgió de forma abrupta.
"Flybondi concluye con éxito la primera temporada de operación de la ruta Buenos Aires - Río Gallegos, cuya programación estacional finaliza el 16 de mayo", dieron a conocer desde la empresa. Luego, sumaron: "En conjunto con el Gobierno de la provincia de Santa Cruz, la compañía se encuentra evaluando los resultados de esta temporada inicial y proyectando nuevas oportunidades para su continuidad en próximas etapas".
Aunque esta novedad tomó desprevenidos a muchos usuarios frecuentes que usaban la aerolínea para viajar al sur, Flybondi todavía tiene algunas rutas habilitadas hacia la Patagonia. Así lo informaron desde la empresa: “Flybondi continuará operando sus rutas hacia y desde la provincia, como Buenos Aires – El Calafate y El Calafate – Ushuaia, reafirmando su compromiso con la conectividad aérea de Santa Cruz". Por último, el comunicado finalizó: "La aerolínea agradece al Gobierno de Santa Cruz por el trabajo articulado y celebra los avances logrados para seguir fortaleciendo el turismo y la movilidad en la región".
Expertos revelaron los secretos para dormir en un avión y relajarse por completo
Dormir en aviones puede ser complicado, especialmente para aquellas personas a las que les cuesta dormir en lugares que no sean su propia cama. Sin embargo, los expertos aseguran que hay algunas cosas que se pueden hacer para aumentar las posibilidades de tener un descanso placentero a la hora de subirse a un avión, y de esta manera, hacer que el viaje sea más leve.
Los aviones tienen la ventaja de tener un movimiento tan sutil que casi ni se siente, a diferencia de otros medios de transporte. Por esta razón, muchas personas logran dormir plácidamente, en especial cuando se trata de vuelos largos. Por otra parte, hay quienes -ya sea por nervios o problemas para dormir en lugares incómodos- no pueden conciliar el sueño en un avión.
1. Poné el foco en relajarte, no en dormirte
Cuando estamos pensando constantemente en que hay que dormir, generalmente se genera insomnio porque nos sentimos presionados En vez de eso, es mejor relajarse. "Mi consejo para dormir mejor es no enfocarse tanto en el hecho de dormir", dice la presentadora de televisión y experta en viajes Darley Newman, en diálogo con Real Simple. "A veces, solo descansar ya es suficiente". Así que en tu próximo vuelo nocturno, probá con dejar que el descanso fluya sin forzarlo.
2. Recreá tu rutina de noche
Aunque no tengas acceso a tu cama o baño habitual, podés armar una versión simplificada de tu ritual nocturno. La autora de viajes Michelle Joy comenta que cuando está en su casa, suele darse una ducha, hacer su rutina de cuidado facial y ponerse un pijama limpio. En el avión adapta esos pasos: se cepilla los dientes, se pasa una toallita húmeda por el rostro, aplica una crema hidratante y se pone medias cómodas y calentitas.
3. Elegir el asiento de la ventana
Aunque volar en clase ejecutiva sería ideal, si viajás en económica, elegir el lugar correcto al lado de la ventana puede hacer la diferencia. La periodista de viajes Wendy Helfenbaum recomienda pedir ventanilla. Esto no solo te permite apoyar la cabeza contra la pared del avión, sino que también evitás interrupciones si los demás pasajeros necesitan levantarse.
4. Usá una app que te prepare para el cambio horario
Erin Carey, directora de la agencia de prensa de viajes Roam Generation, destaca el uso de la app Timeshifter para combatir el jet lag. Esta aplicación ofrece un plan personalizado según el horario del vuelo y del destino. “Me ayuda a adaptarme al nuevo huso horario: sigo sus instrucciones al pie de la letra, desde cuándo evitar la cafeína hasta cuándo tomar melatonina”, explica. Si necesitás dormir durante el vuelo para llegar más fresco, puede ser una herramienta clave.