La Verificación Técnica Vehicular (VTV) es un trámite fundamental a la hora de circular por el país, ya que se trata de una inspección que se encarga de que los vehículos cumplan con los requisitos mínimos de seguridad y así prevenir posibles accidentes. Acá te contamos cómo ahorrarte el 50% del costo de este importante trámite.
Conducir sin la VTV vigente puede acarrear consecuencias graves, como importantes multas, retención de la licencia y hasta secuestro del vehículo. Incluso, en caso de un accidente, la ausencia de la verificación puede dejar al conductor sin cobertura del seguro. Para evitar este problema, se recomienda siempre estar atentos a cuándo vence la VTV para tener el trámite al día.
En tiempos de crisis económica, la posibilidad de ahorrarse la mitad del valor del trámite es muy atractivo y un grupo de conductores tiene la posibilidad de aprovechar este importante descuento. Se trata nada menos que de jubilados y pensionados quienes cuentan con la chance de pagar solo el 50% de la VTV.
Los requisitos que deben cumplir jubilados y pensionados para que la VTV les salga la mitad:
- Ingresos mensuales iguales o menores al doble del Salario Mínimo Vital y Móvil
- Recibo más reciente del cobro de jubilación o pensión.
- Demostrar que el vehículo a verificar está registrado a nombre del solicitante (cédula verde).
- Constancia que certifique que la VTV está al día y vigente en la provincia.
Cuál es la clave para no fallar en la inspección de la VTV que muchos ignoran
Uno de los detalles que más importancia tiene a la hora de hacer los controles de la VTV, que muchos menosprecian o no revisan, tiene que ver con la inspección es el correcto funcionamiento de todos los cinturones de seguridad.
En este sentido, los controles que se realizan son:
- Chequeo de que cada asiento cuente con uno, que puedan abrocharse correctamente y que se mantengan firmes.
- Control de que puedan ajustarse correctamente al cuerpo de cada pasajero y funcionar de manera eficiente en todos los puntos de anclaje.
- Control de que no presenten roturas, desgaste excesivo ni partes sueltas. Es que cualquier falla en su funcionamiento podría derivar en una observación o incluso en la desaprobación de la inspección.
Vale mencionar que este control, desconocido por mucha gente, se hace desde siempre, ya que la revisión de los cinturones siempre fue parte de la evaluación para la seguridad de los vehículos. La cuestión es que en los últimos años se endureció este control, con el fin de evitar víctimas ante los siniestros o accidentes.
En el caso de que se esté llevando a cabo la inspección y no se encuentre con el cinturón o este esté en malas condiciones, las autoridades podrían realizar una observación o bien desaprobar el trámite por fallas leves o graves.
Los autos que desaprueban la verificación técnica y obtienen un informe “rechazado” o “condicional”, por lo que no pueden irse con la oblea pegada, pueden volver a presentarse nuevamente dentro de los 60 días después de la primera prueba.