En los últimos tiempos se ha incrementado la cantidad de personas que se adhieren al monotributo, ya sea por emprender un negocio o trabajar en varias empresas, entre otras posibilidades. Sin embargo, muchos contribuyentes cometen errores que se pueden evitar si se los identifica de antemano y eludir las multas por parte de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA).
Uno de los errores más importantes que un monotributista puede cometer es no facturar de forma obligatoria cualquier operación que lleve a cabo. No hacerlo es equivalente a no declarar esa operación y quedar en la informalidad o "en negro". Esto puede llevar a que el contribuyente sea objeto de investigación por parte de ARCA e incluso puede haber consecuencias negativas como perder el acceso al régimen.
Es clave que después de cada factura, el contribuyente lleve un registro de la misma, tanto a nivel mensual como anual, en línea con la recategorización. La categoría del monotributo a la que pertenece un contribuyente se determina en función de la facturación de los últimos 12 meses, además de otros aspectos como el consumo de energía y la dimensión del local. Según los parámetros actuales, se debe llevar a cabo la recategorización, incluso si no corresponde cambiar de categoría.
Es importante destacar que, si bien los contribuyentes que permanecen en su categoría no suelen enfrentar sanciones por no realizar la recategorización, aquellos que corresponden hacerla y no la efectúan pueden sufrir una "recategorización de oficio" e incluso enfrentar multas y exclusiones.
¿Qué otros errores comunes cometen los monotributistas?
Además, los monotributistas, al igual que otros contribuyentes, deben abonar el impuesto provincial conocido como Ingresos Brutos, el cual se paga según la actividad que se realiza. Es fundamental tener en cuenta que los vencimientos del monotributo son los días 20 de cada mes o el siguiente día hábil en caso de caer en fin de semana o feriado. Esta es una obligación fija que debe ser cumplida por todos los contribuyentes, sin importar si se facturó o no.
En caso de saber que no se facturará durante un período prolongado, conviene informar la baja del monotributo para evitar acumular deudas innecesarias. Por último, es indispensable que el monotributista tenga la constancia de inscripción en papel, ya que esta puede ser requerida por cualquier inspector o para realizar trámites. La impresión de la constancia se puede realizar desde la página de ARCA o a través de la aplicación. Además, aquellos que tienen un negocio con atención al público deben exhibir el QR que lleva al formulario 960 Data Fiscal.