Qué es el proyecto de Ley Garrahan: de qué trata y en qué consiste

Mientras Javier Milei intenta sostener el ajuste a toda costa, la Ley Garrahan es un nuevo símbolo de resistencia en el Congreso. En qué consiste esta legislación y cuándo se votaría en la Cámara de Diputados.

06 de agosto, 2025 | 14.35

La Cámara de Diputados se prepara para debatir este miércoles un proyecto de bajo costo fiscal, pero alto voltaje político: la llamada Ley Garrahan, que declara la emergencia en la salud pediátrica y el sistema de residencias médicas a nivel nacional. De acuerdo a un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), su costo estimado es de apenas 0,01% del PBI, pero los mercados no miran los números: miran el escenario.

Con la oposición unificada en torno a esta iniciativa y luego de los vetos presidenciales —jubilaciones, moratoria previsional, discapacidad— que podrían ser revertidos, el proyecto vuelve a exponer la debilidad política del presidente Milei

De qué se trata la Ley Garrahan

El proyecto, impulsado por bloques opositores, propone declarar la emergencia sanitaria pediátrica por un año (el dictamen original proponía dos), y establece medidas concretas como:

  • Recomposición salarial para el personal médico y no médico afectado a la atención pediátrica.
  • Eximición del Impuesto a las Ganancias en rubros específicos de sus remuneraciones.
  • Asignación inmediata de recursos, vía reasignación presupuestaria o uso de reservas.

Marcha de los trabajadores del Hospital Garrahan.

El dictamen cuenta con 12 artículos y busca equiparar los sueldos del personal sanitario pediátrico al nivel de noviembre de 2023, lo que implica un gasto adicional de 65.573 millones de pesos hasta diciembre. Anualizado, llegaría a 133.433 millones, lo que equivale a 0,019% del PBI. Números ínfimos, especialmente si se los compara con otras decisiones fiscales del Gobierno.

El costo que no preocupa

Según la OPC, el costo fiscal del proyecto es simbólico. En lo que resta del año, representa 0,007% del PBI. Incluso anualizado, sigue siendo menor al 0,1% que implica la rebaja de retenciones agroindustriales, que el Gobierno no dudó en implementar.

Es paradójico, ya que esa baja de retenciones no generó alarma en los mercados. En cambio, la posible aprobación de esta ley —a pesar de su impacto fiscal casi nulo— sí lo hizo. La diferencia es clara: no es una cuestión de números, sino de señales políticas.

Más allá de la letra chica, la Ley Garrahan expresa la urgencia de un área abandonada por la gestión de Milei. Que el Gobierno se niegue a financiar lo básico para hospitales pediátricos, mientras se abren exenciones al agro o se ajusta brutalmente en otras áreas, genera ruido no sólo en la política, sino también en toda la sociedad. En ese sentido, trabajadores y familiares de pacientes del Hospital movilizarán este miércoles al Congreso para visibilizar que la salud infantil debe ser un valor irrenunciable.