"Contradicciones y falsedades" en el triple femicidio: piden careo entre Sotacuro y la inquilina de la casa

Este lunes los abogados defensores de Víctor Sotacuro presentaron una solicitud para que su defendido, quien sostiene ser un simple remisero, lleve a cabo un careo con Celeste González Guerrero, imputada que lo ubicó en la escena del crimen.

20 de octubre, 2025 | 17.18

En el marco de la causa que investiga el triple femicidio de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, la defensa de Víctor Lázaro Sotacuro, uno de los principales imputados del crimen ocurrido en Florencio Varela, presentó este lunes un pedido a la fiscalía para que se realice un careo con Celeste González Guerrero, otra de las imputadas por ser la inquilina de la casa de Villa Vaettone en la que ocurrieron los terribles hechos del triple crimen.

Los abogados defensores, Guillermo Endi y Agustina Vivas Ferlin, presentaron este lunes un escrito en el cual se sostiene que existen "contradicciones sustanciales y falsedades evidentes" en las declaraciones que González Guerrero dio frente a los fiscales como "arrepentida" del caso.

El careo solicitado por la defensa

Las declaraciones a las que ataca la defensa de Sotacuro, son aquellas en las que la imputada situó a Víctor en la Chevrolet Tracker blanca en la que llegaron las chicas a su casa y en las que además le adjudica ser el dueño de la droga que fue robada y derivó en los tres femicidios.

En el escrito presentado, la defensa de Sotacuro resaltó varios puntos contradictorios en el relato de González Guerrero, entre los que se destacan que Guerrero ubicó al acusado en el domicilio donde ocurrió el triple crimen y señaló que el mismo habría bajado de la camioneta con las chicas, hecho que los abogados argumentan nunca sucedió. Los defensores agregaron: "El careo resulta una medida indispensable para esclarecer las contradicciones entre ambas declaraciones, ya que las declaraciones de la acusada buscan ubicar a Sotacuro en la escena del crimen sin ningún sustento objetivo".

Los juristas señalan que su representado aseguró desde el primer momento que "no ingreso a la casa en ningún momento y permaneció afuera del inmueble".

A su vez, otro de los puntos en los que se encuentra conflicto reside en la identificación confusa de los apodos. En el escrito presentado a Carlos Adrián Arribas, fiscal a cargo de la investigación, se señala que la imputada confundió el alias de "El chato", el cual corresponde a Sotacuro, con el de "El Duro", el cual corresponde a otra persona dentro del grupo investigado. Lo que para la defensa constituye un error que altera la imputación de las responsabilidades.

Para argumentar esta solicitud, los abogados se apararon en el artículo 252 del Código Procesal Penal de la Provincia de Buenos Aires, el cual estipula que el careo es una herramienta para evitar que una versión falsa adquiera valor probatorio indebido y así garantizar el esclarecimiento de las discrepancias.

Finalmente, para aprovechar la presencia simultánea de ambos imputados en la fiscalía, los defensores solicitaron que este lunes se lleve a cabo el acto procesal.