Desde siempre, el ser humano mostró una gran curiosidad por conocer el universo más allá de nuestro planeta. Gracias a los avances tecnológicos, hoy es posible explorar lugares remotos del espacio y descubrir datos que cambian nuestra visión del cosmos. Incluso, se puede obtener mayor información sobre el resto de los mundos que habitan el sistema solar.
En este marco, la NASA realizó un estudio que aporta una nueva mirada sobre el planeta enano Ceres, el más pequeño del cinturón de asteroides. Según esta investigación, Ceres habría tenido en su interior una fuente de energía química duradera que pudo hacerlo compatible con la vida hace alrededor de 3.000 millones de años.
El trabajo, dirigido por Sam Courville y publicado el 20 de agosto, usó modelos químicos y térmicos para simular la evolución interna de Ceres durante un extenso periodo. Los resultados indicaron que bajo su superficie existió una fuente continua de agua caliente junto con gases como metano y dióxido de carbono, elementos clave para procesos biológicos.
Estos recursos emergían desde un núcleo rocoso que había sufrido metamorfosis, lo que coincide con hallazgos anteriores de la misión Dawn en 2018, que confirmó la presencia de agua. Los puntos más brillantes en la superficie de Ceres correspondían a zonas con depósitos de sales, vestigios de ese líquido que brotaba desde el subsuelo.
Sobre esto, Courville destacó: “En la Tierra, cuando el agua caliente de las profundidades se mezcla con el océano, suele convertirse en un banquete para los microbios, una auténtica fuente de energía química. Por eso, sería muy relevante determinar si el océano de Ceres recibió un flujo de fluidos hidrotermales en el pasado”.
¿Cómo es Ceres en la actualidad?
Hoy, Ceres es un mundo frío y seco, donde la actividad radiactiva ya no genera suficiente calor para mantener líquidos en estado natural, transformándose en salmuera concentrada. A pesar de esto, la comunidad científica no descarta que en épocas pasadas las condiciones hayan sido propicias para la vida, abriendo nuevas preguntas sobre la habitabilidad en el sistema solar.