Existen muchos alimentos ricos en magnesio pero hay una bebida conocida por pocos que tiene un gran aporte de este mineral tan necesario para el cuerpo y la mente, ya que regula la función de los músculos y el sistema nervioso. Además, controla los niveles de azúcar en la sangre y la presión sanguínea.
Además, esta bebida tiene una gran cantidad de calcio que representa más del 99 por ciento del contenido mineral de los huesos y dientes, es indispensable para la estructura ósea y la prevención de fracturas.
Se trata de la leche de sésamo, unas semillas que se destacan como alimentos ricos en nutrientes esenciales cómo calcio, magnesio y antioxidantes. Se puede preparar dejando las semillas remojadas y luego licuándolas.
Los beneficios de la leche de sésamo:
- Aporte de energía: su contenido de magnesio y vitaminas del grupo B contribuye a reducir la fatiga, el estrés y otros problemas nerviosos.
- Protección cardiovascular: los ácidos grasos Omega-3 presentes en esta bebida ayudan a reducir los niveles de triglicéridos en sangre, disminuyendo el riesgo de aterosclerosis y enfermedades cardíacas, según la Cleveland Clinic.
- Propiedades antioxidantes y antiinflamatorias: la sesamina y el sesamol, compuestos presentes en el sésamo, combaten el daño oxidativo y ayudan a reducir la inflamación celular.
- Fortalecimiento óseo: La leche de sésamo contiene incluso más calcio que la leche de vaca, lo que la convierte en una excelente opción para prevenir condiciones como la osteoporosis.
Según la Sociedad Americana de Nutrición, el sésamo contiene un 7 por ciento más de calcio que la leche de vaca y es rico en magnesio, fósforo, hierro y zinc. Además, aporta ácidos grasos insaturados como Omega-6 y Omega-9, esenciales para la salud cardiovascular.
De todas maneras, hay algunas personas que no deberían tomar leche de sésamo pese a sus múltiples beneficios porque también puede tener algunas contraindicaciones.
Estas personas no deben tomar leche de sésamo:
- Alérgicos al sésamo: las personas con alergia al sésamo deben evitar su consumo, ya que puede desencadenar reacciones alérgicas graves, incluyendo dificultad para respirar y anafilaxia.
- Personas con afecciones intestinales: por su alto contenido en fibra, puede irritar a quienes padecen diverticulitis o síndrome del intestino irritable.
- Quienes padezcan problemas de tiroides y trastornos de la coagulación: debido a su efecto en la función tiroidea y su interacción con anticoagulantes, las personas con problemas de tiroides o en tratamiento médico deben consultar a un profesional antes de consumirla.