Cientos de trabajadores protestaron este viernes frente al Ministerio de Salud por más de 360 despidos en áreas sensibles como la Dirección de Vacunas y la Dirección de Respuesta al VIH, Tuberculosis, Hepatitis y Lepra. En este marco, se registraron momentos de tensión con grupo de efectivos policiales que llegaron al lugar. Advierten que el gobierno de Javier Milei dejó "sin soporte el registro nominal de vacunación, sin abogada y médica legista, compras, cadena de frío y área médica a la mitad" de las dependencias. "Esto se va a pagar con vidas humanas", denuncian.
Luego de enterarse que iban a ser despedidos, cientos de trabajadores se congregaron en las puertas del Ministerio de Salud de la Nación, en Lima y Belgrano, para protestar por los puestos perdidos. "Hay 30% de despidos en la Dirección de Vacunas y 40% en la Dirección de Respuesta al VIH, Tuberculosis, Hepatitis y Lepra", aseguraron desde la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (Fesprosa). Según pudo saber este medio, la metodología que adoptaron en este caso es similar a la de otras ocasiones en las que decidieron no renovar contratos que finalizan este 31 de enero.
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Los trabajadores alertan que en la coordinación de Hepatitis fue desvinculada "la única médica especialista en el tema" y remarcan que también fue echado el "responsable de la compra de reactivos". "Sigue el destrozo que esta gente está causando. Esto se va a pagar con vidas humanas", afirman. En esa línea, también advirtieron que se dejó "sin soporte el registro nominal de vacunación, sin abogada y médica legista, compras, cadena de frio y área médica a la mitad" de las dependencias.
Como sucede en todas las protestas de trabajadores despedidos durante la era Milei, el Ministerio de Seguridad liderado por la ministra Patricia Bullrich desplegó un fuerte operativo con un nutrido grupo de efectivos de a pie y motorizados de la Policía Federal Argentina (PFA), que intentaron disipar a los manifestantes.
"El ministro de Salud Mario Lugones es responsable del vaciamiento de áreas clave que el 31 de enero vieron reducida su capacidad de acción debido al despido de más de 360 trabajadoras y trabajadores de la cartera sanitaria nacional", manifestaron desde ATE Salud. Además de lo ya mencionado, "se ven damnificadas la distribución de medicamentos en hospitales de todo el país, la presencia territorial para atender catástrofes tales como incendios o inundaciones y la prevención y control de enfermedades de animales a humanos", enumeraron.
Desde ATE aseguran que se trata de una continuidad de la "política de crueldad" que viene llevando adelante el máximo mandatario nacional, iniciada el año pasado con recortes en tratamientos contra el cáncer -que provocó la muerte de decenas de personas-.
"La gran mayoría de las personas despedidas ya rindieron el examen impuesto por el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, el cual aprobaron, demostrando una vez más, por si hiciera falta, su idoneidad", apuntaron. Dichas vidas amenazadas, forman parte de un "arrasamiento de un sistema de salud históricamente castigado que sobrevive gracias al compromiso y a la dedicación" de los profesionales.
El detalles de las desvinculaciones en Salud
El Ministerio eleva la apuesta y afirma que los despidos "son más"
Desde el Ministerio de Salud habían asegurado a El Destape que incluso los despidos "son más" y llegarán a ser 330 desvinculados, el doble de los denunciados por los trabajadores. La cartera de Salud plantea que "no afecta el funcionamiento ni cumplimiento de las responsabilidades" de las áreas donde ocurren las desvinculaciones. "Eran áreas que estaban sobre dimensionadas, las desvinculaciones responden a duplicación de tareas con otras áreas, falta de funciones e inasistencias injustificadas. Incluso había un locutor", argumentan desde la cartera que dirige Mario Lugones.
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A mediados de este mes, el Gobierno nacional había anunciado más de 1400 despidos como parte del plan de reducción del Estado elaborado por el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, quien este jueves celebró la desafección de 37.595 personas en el primer año de gestión de todo el ámbito nacional.
“En un contexto donde los diagnósticos de VIH y Tuberculosis no dejan de aumentar y las hepatitis virales continúan siendo prevalentes, el desmantelamiento de las direcciones y la eliminación de las coordinaciones que desarrollan policías públicas para la salud resulta criminal”, apuntaron desde el Frente VIH, Hepatitis y Tuberculosis.