El tango "Caminito" resuena en el imaginario colectivo argentino y mundial como una de las piezas más emblemáticas del género, que incluso logró mucha popularidad con la voz de Carlos Gardel. Su melodía nostálgica y letra evocadora transportan a muchos al colorido paseo de La Boca, en Buenos Aires. Sin embargo, la historia detrás de su creación revela una fascinante dualidad entre la inspiración de su letra y su música.
Contrario a la creencia popular, la letra del tango "Caminito" no fue concebida pensando en las calles porteñas, sino que fue escrita en 1903 por el poeta Gabino Coria Peñaloza, mucho antes de que se le pusiera música. Originalmente, un poema, estas palabras eran un homenaje sentido a un sendero real ubicado en un paisaje rural de la provincia de La Rioja, específicamente en la localidad de Olta.
Este "caminito" era parte de una antigua huella que conectaba Olta con el cercano pueblo de Loma Blanca, un camino cargado de significado personal para el poeta, ya que Olta era el pueblo natal de su madre. Luego, años después de que Peñaloza escribiera su poema, el compositor y músico Juan de Dios Filiberto creó la música que hoy todos reconocemos.
A diferencia de la letra, la inspiración de Filiberto sí provino del ambiente cultural de Buenos Aires y del espíritu tanguero asociado al barrio de La Boca, donde existe el famoso pasaje turístico homónimo. La fusión de la lírica rural riojana de Peñaloza con la melodía tanguera porteña de Filiberto dio vida a la canción.
Su popularidad se disparó y se consolidó en el repertorio clásico argentino, alcanzando fama internacional gracias a las interpretaciones de numerosos artistas. Entre las versiones más célebres e icónicas se encuentra, sin duda, la grabada por el "Zorzal Criollo", Carlos Gardel, cuya voz inmortalizó la melancolía y belleza de la canción para generaciones.
El "Caminito" original del tango: un destino turístico de La Rioja
De esta manera, el sendero que inspiró a Gabino Coria Peñaloza se encuentra en Olta, ciudad cabecera del departamento General Belgrano, en el centro oriental de La Rioja, a unos 170 km de la capital provincial. Conocida como el "Oasis de los Llanos Riojanos", Olta se ubica en las nacientes de la Sierra de los Llanos, en una zona de clima árido.
Aquel "Caminito" admirado por el poeta era un sendero rural de aproximadamente 2 kilómetros que unía Olta con Loma Blanca, formando parte de una huella ancestral más larga. Hoy en día, a lo largo de este recorrido, diversos monumentos recuerdan al poeta Coria Peñaloza y su famosa creación. Además de seguir los pasos del poeta, los visitantes de Olta pueden disfrutar de otros atractivos:
- Dique de Olta: Un embalse regional ideal para deportes náuticos, pesca y caminatas por la quebrada circundante.
- Bosque de Árboles Petrificados: Un yacimiento fósil de 42 hectáreas con troncos petrificados de gran tamaño, cortezas y astillas diseminadas.
Olta, con menos de 10.000 habitantes, combina su actividad agrícola con un creciente desarrollo turístico, ofreciendo a los visitantes la posibilidad de conectar con la historia de uno de los tangos más famosos de Argentina en su lugar de origen.