El atentado que dejó 26 turistas fallecidos y 17 heridos desató una fuerte crisis diplomática entre India y Pakistán y una escalada de la tensión en la región en disputa hace casi 80 años: ambos países cancelaron y revocaron visas a civiles, cerraron las fronteras y el espacio aéreo. También se canceló el comercio y la implementación del Tratado de las Aguas del Indo, que dispone la distribución de los recursos hídricos de la zona. Esto último, fue tomado por la parte paquistaní como una alerta cuyas acciones, dijeron, podrían llegar a considerar como un “acto de guerra”.
¿Qué pasó?
El ataque perpetrado este martes en Pahalgam -una importante zona turística- fue el más mortífero contra civiles en el territorio indio, de mayoría musulmana, desde el año 2000. Allí, al menos, tres hombres armados abrieron fuego contra un grupo de turistas en Pahalgam, una zona administrada por India.
Según reportó CNN, algunos sobrevivientes relataron a medios locales que los hombres acusaron a las familias de apoyar al primer ministro, Narendra Modi, antes de disparar.
“Desde la tierra de Bihar le digo al mundo entero que la India identificará, rastreará y castigará a todos los terroristas y a quienes los apoyan”, dijo Modi en el inglés en lugar de su hindi habitual en lo que catalogó como un “ataque terrorista”. Y siguió: “El espíritu de la India jamás será quebrantado por el terrorismo. El terrorismo no quedará impune. Se hará todo lo posible para garantizar que se haga justicia. Toda la nación se mantiene firme en esta determinación”, agregó y apuntó contra Pakistán.
El hecho fue reivindicado por un grupo insurgente local denominado Frente de Resistencia (TFR por sus siglas en inglés) en las redes sociales y expresó su descontento por supuestos “forasteros” que se asentaron en la región y que habrían provocado un cambio demográfico. El grupo declaró su existencia en 2019 a través de un mensaje de Telegram y catalogada como una “organización terrorista” por India, tras vincularla al grupo islamista proscripto Lashkar-e-Tayyba, que estuvo detrás de ataques mortales en Mumbai.
Luego de ello, la policía de Cachemira publicó avisos con los nombres de tres sospechosos con ciudadanía pakistaní. Aunque desde Pakistán negaron toda responsabilidad al conocerse las medidas tomadas por el Gobierno hindú respondió en reciprocidad.
Las acciones de India y las medidas recíprocas
El Gobierno de Modi anunció "suspensión con efecto inmediato" de la expedición de visados a los pakistaníes y la anulación de todos los que estén en curso de aquí al 29 de abril. "Todos los ciudadanos pakistaníes que se encuentren actualmente en India deberán abandonar el país", determinó.
El gobierno pakistaní llamó a una reunión del Comité de Seguridad Nacional que advirtió que “cualquier amenaza a la soberanía de Pakistán y a la seguridad de su pueblo será respondida con firmes medidas recíprocas". Al término del encuentro, anunciaron inmediatamente la expulsión de diplomáticos y la suspensión de visados indios, así como el cierre de su frontera y su espacio aéreo. También declararon como “personas non gratas” a los asesores indios de defensa, navales y aéreos en Islamabad y suspendieron “inmediatamente todo comercio con India, incluido el que tiene como origen o destino terceros países que transitan por Pakistán".
“Pakistán condena rotundamente el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones. (…) Ante la falta de una investigación creíble y pruebas verificables, los intentos de vincular el ataque de Pahalgam con Pakistán son frívolos, carentes de racionalidad y de lógica de derrota”, destacaron en una nota las autoridades pakistaníes. Al mismo tiempo, dijeron que la India “debe resistir la tentación de explotar incidentes tan trágicos para su beneficio y asumir plena responsabilidad por su incapacidad para proporcionar seguridad a su pueblo”.
La disputa por el agua y la probabilidad de una nueva guerra
Entre las medidas anunciadas por India está la denuncia del Tratado de las Aguas del río Indo, un acuerdo firmado en 1960 auspiciado por el Banco Mundial y que dispone los términos de la distribución de los recursos hídricos de la zona gravemente amenazada por la sequía generada por el cambio climático. El acuerdo sobre el río nunca había sido cuestionado, si quiera durante las tres guerras en las que ambos países se enfrentaron.
Esto afectaría directamente la producción agrícola paquistaní, por lo que el Gobierno del presidente, Asif Ali Zardari, respondió que “cualquier intento de detener o desviar el flujo de agua perteneciente a Pakistán” según dicho tratado “se considerará un acto de guerra y se responderá con toda la fuerza a través de todo el espectro del poder nacional”. Además, amenazaron con suspender el Acuerdo de Simla, el histórico pacto firmado en 1972 que permitió normalizar las relaciones entre ambos países.
En tanto, el titular de Defensa paquistaní, Jawaja Asif, acusó a India de librar "una guerra de baja intensidad" contra Pakistán y aseguró que cuentan con información de Inteligencia que conecta al país vecino con la preparación de ataques terroristas en ciudades paquistaníes. "Si quieren aumentar la escalada, estamos listos. No cederemos ante ninguna presión internacional cuando se trata de nuestro territorio y nuestra seguridad", agregó el ministro, según reportó el diario paquistaní Dawn.
La disputa por el territorio
El destino de la región quedó indeciso en 1947, cuando los británicos dividieron la India, su antigua colonia, en dos países. Uno Pakistán, de mayoría musulmana; y el otro, compuesto mayoritariamente por hindúes, conservó el nombre de India.
El gobernante hindú de Cachemira, que también había quedado bajo la soberanía de la India británica, negó la adhesión a ambas naciones algo que a los pocos meses cambió de opinión y decidió que el territorio formara parte de la India. Para entonces, ese espacio, rico en belleza natural y recursos, ya estaba en disputa y Pakistán no renunció a su pretensión.
Con el tiempo, la región pasó a estar controlada en partes por ambos países y a convertirse en una de las regiones más militarizadas del mundo, en medio de dos potencias nucleares.